Los Pistons podrían coronarse esta noche

Los Pistons podrían coronarse esta noche

AUBURN HILLS, Michigan (AP).- Los Pistons de Detroit están a solamente un triunfo de dar al técnico Larry Brown lo único que le falta en su carrera: El título de la NBA.

Detroit puede conseguirlo si vence a los Lakers de Los Angeles el martes en el 5to juego de la final de la NBA, o de ser necesario, en los otros dos que debería disputar si ganan los Lakers.

«El no lo dice, pero pienso que (el título) validaría muchas cosas para él», dijo el base Lindsey Hunter.

Brown ha ganado más de 1.000 partidos con siete equipos en 21 campañas, pero otro triunfo esta semana vindicaría su carrera.

«Yo probablemente me vería más inteligente si gano», bromeó Brown.

Aunque muchos están sorprendidos de que Detroit tenga una ventaja de 3-1 sobre Los Angeles, los Pistons no lo están.

Los Pistons han estado confiados en sus probabilidades de llevarse el título, y eso no tiene nada que ver con nada nuevo que haya dicho o hecho Brown.

Antes del inicio de la serie, Brown simplemente repitió su mantra: «Jueguen como se debe» _ lo que quiere decir no ser egoísta en el ataque, y ser agresivo en la defensa. El entrenador nunca se ha desviado de su comportamiento calmado.

«El ha abordado las cosas de la misma forma desde el primer día de la pretemporada», dijo Tayshaun Prince. «No ha cambiado nada en los playoffs ni en la final».

Cuando se mencionó a Brown su búsqueda del título, el coach hizo lo mejor posible por desviar la atención.

«Durante toda mi carrera me han enseñado que no se trata de mí», dijo, casi suplicando que se cambiase de tema. «Se trata de los jugadores».

Mientras los jugadores de Detroit mantienen su optimismo y determinación para el juego que se avecina, los de Los Angeles tratan de figurar cómo las cosas les han salido tan mal.

Dos jugadores en específico, Kark Malone y Gary Payton, firmaron esta campaña con los Lakers porque consideraron que era la vía más segura para llevarse el título que falta a sus carreras.

Ahora, con un 3-1 adverso, y lastrados por lesiones y frustraciones, sus sueños parecen casi evaporados.

«Aún no hemos jugado bien», dijo Payton.

Aunque ninguno de ellos ha logrado contribuir de la forma habitual, ambos siguen optimistas, y se niegan a ver el juego del martes como posiblemente su último con Los Angeles.

«No quiero saber si acaba mañana _ No quiero pensar en eso», dijo Malone.

Payton, por su parte, dijo que no creía que «va a ser mi último juego con los Lakers. Pienso que vamos a recuperarnos».

Malone se vio limitado a 18 minutos en el tercer juego y 21 en el cuarto, por estar resentido de una lesión en la rodilla.

«Todo sería bien diferente si Kark Malone estuviese al 100%», dijo el coach asistente Tex Winter.

Payton ha jugado en todos los partidos de los Lakers este año, pero no ha conseguido adaptarse al sistema ofensivo de Los Angeles.

«Tengo que vivir con el sistema. No es hora de quejarme ni llorar», dijo.

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