Hoy 
POR CARMEN MATOS
El director de la Dirección General de Normas y Sistemas de Calidad (DIGENOR), Julio Santana, atribuyó ayer la gran cantidad de accidentes por escapes de gas de los cilindros de uso doméstico a las condiciones de pobreza en que viven los habitantes de las barriadas de esta capital, y no a la falta de supervisión y controles de calidad. Así reaccionó a planteamientos hechos por intendentes de bomberos.
Sostuvo que el hacinamiento y las precariedades económicas obligan a la población a recurrir a los talleres de reparación improvisados que aplican múltiples soldaduras a los cilindros buscando extender su vida útil y convirtiéndolos en bombas de tiempo.
Las declaraciones de Santana se producen a raíz de la denuncia que hizo anteayer el Intendente del Cuerpo de Bomberos de Santo Domingo, General Oscar Guillermo García, de que por su mal estado, las fugas en los cilindros de gas se han convertido en la segunda causa de incendios en el Distrito Nacional, luego de los cortocircuitos.
Ambos coinciden al señalar que se trata de una problemática que afecta principalmente a las clases más empobrecidas y que debe ser atendida cuanto antes.
Para contrarrestar los males, Santana informó que DIGENOR trabaja en la implementación de varios proyectos para fin de año, que incluyen la capacitación y acreditación de los reparadores e instaladores de tanques para el uso, almacenamiento y transporte del Gas Licuado de Petróleo (GLP) que además establecerá la preparación que deben tener las personas que se dediquen al oficio.
En ese sentido declaró que aunque desde mediados del año 2005 se prohibió la entrada al país de cilindros usados mediante la colocación de técnicos permanentes en las aduanas, aún circulan miles de chatarras que continúan poniendo en peligro a la ciudadanía.
Afirmó que más de un 40 por ciento de los cilindros que se utilizan en el país provienen del extranjero, por lo que cada uno es sometido a pruebas hidrostáticas y chequeos de calidad por especialistas que de inmediato decomisan aquellos que no cumplen con los estándares de calidad, dijo.
De acuerdo a documentos de DIGENOR, de los que HOY tiene copias, entre mayo de 2005 y abril pasado, en el país han sido examinadas 56,691 unidades.
Santana explicó que las empresas nacionales, que producen el restante 60 por ciento de los cilindros de uso doméstico e industrial, son sometidas a pruebas aleatorias cada tres meses y sin previo aviso, dirigidas a los tipos de soldadura y materiales utilizados para la fabricación, detalló.
El funcionario admitió que a raíz de las declaraciones de los directivos del Cuerpos de Bomberos de San Pedro de Macorís, Santo Domingo Este y Oeste, Distrito Nacional y Santiago, publicadas ayer en este diario, la institución se apresta a dirigir una alianza estratégica entre todos los actores del sistema para buscar una solución definitiva al problema.
Los intendentes de Cuerpos de Bomberos de las cinco estaciones señaladas comparecieron al almuerzo de los medios de comunicación del Grupo Corripio que se realiza semanalmente en el Salón de Conferencias de HOY.
SUSTITUIRAN UNIDADES VIEJAS
Santana informó que la institución se prepara para implementar un programa de sustitución de los cilindros domésticos de gas en mal estado por otros nuevos, con lo que pretende beneficiar a las clases más pobres.
El funcionario indicó que aún no se han iniciado las negociaciones en las que dijo deberá participar la Secretaría de Industria y Comercio, los Cuerpos de Bomberos y distribuidores de cilindros de gas.
Se trata de una gran pero necesaria inversión que está dirigida a garantizar la calidad y la seguridad de las familias, dijo.
A pesar de que el organismo ha producido múltiples campañas para orientar a la población sobre las pautas a seguir para prevenir accidentes con el manejo del combustible, lamentó que todas se estén engavetando debido a la falta de recursos.
