Dajabón.- Los problemas socioeconómicos que rodean a esta provincia la mantienen al margen del desarrollo.

Un comercio binacional con Haití descontrolado, el deterioro de calles, caminos vecinales y carreteras que colindan con otras provincias del noroeste, la migración haitiana y el contrabando de alimentos, armas de fuego y drogas por la frontera, están entre sus mayores preocupaciones.

Además, el déficit energético, la delincuencia,  poca inversión del gobierno en  educación y salud,  se agregan a los padecimientos de los habitantes.

El  director de Solidaridad Fronteriza, padre Regino Martínez, considera que el primer paso de las autoridades debe ser el inicio del proceso de desarrollo, que las instituciones del Estado dejen de funcionar como entidades personalizadas.

El religioso criticó el hecho de  que los funcionarios gubernamentales, municipales y los legisladores, se  sientan más preocupados por las elecciones venideras que por los problemas que afectan a la población.

“Ése es el problema de Dajabón, que los políticos sólo se interesan en sus campañas electorales y no hacen un plan serio que beneficie a los pueblos. Con dádivas y clientelismo quieren entretener a la gente”.

Algunos moradores manifestaron que la falta de empleos, crisis en el sector agrícola, calles en mal estado y la presencia haitiana en labores agrícolas y de construcción, causa inconvenientes a la gente.

“Creemos que como estamos muy lejos de Santo Domingo, todos los gobiernos se olvidan de nosotros y solo se acuerdan cuando se acercan las elecciones”, afirmó Waldyn  Peralta, un motoconchista, padre de familia que lamentó la falta de apoyo del gobierno.

En tanto,  el  obrero Melanio Domínguez, confió en que en algún momento los gobiernos puedan satisfacer las necesidades de este pueblo, que durante años ha sufrido la dejadez de las autoridades.

El padre Regino Martínez dijo que la presencia masiva de haitianos en el país se debe a la falta de control y transparencia de las autoridades y a la carencia de una ley de migración.

“Dajabón es la provincia en que menos haitianos residen, porque el inmigrante que viene aquí es  a trabajar en la agricultura, construcción, labores domésticas, y a estudiar, y en la tarde regresa a su país». 

El gobernador. Miguel Cruz Jiménez, informó que el mercado binacional es una realidad en Dajabón, aunque manifestó que la obra  se  pretende ampliar. Dijo que se trabaja en construcción de la carretera Santiago de la Cruz y Villa Los Almácigos, la cual conecta con Santiago Rodríguez.

Economía

La economía  es esencialmente agrícola, aunque en los últimos años la ciudad se ha convertido en un centro importante de intercambio comercial con Haití.

La  historia de  Dajabón   narra que fue creada en 1938 con el nombre de provincia Libertador. Su inauguración como provincia se realizó el primero de enero de 1939.  El nombre taíno de la región es Dahaboon, el cual lo lleva  además  el  río principal y el  municipio cabecera. La provincia tiene más de 60 mil habitantes. Hasta el momento, el turismo en la zona  es mínimo y sólo los pequeños balnearios en el Río Masacre, especialmente en Loma de Cabrera, son visitados por munícipes locales y de regiones vecinas.

La provincia está limitada al Norte por  Montecristi, al Este por Santiago Rodríguez, al Sur por  Elías Piña y al Oeste por Haití.