Una de la primera estratega a utilizar por el equipo de Houston Rockets, según explicó su general manager Daryl Morey, es descansar a su estelar jugador Dwight Howard con la finalidad de que llegue saludable a la postemporada.

La pasada temporada el titular pívot se perdió 41 partidos de la regular debido a las lesiones en su rodilla, aunque volvió plenamente recuperado para disputar los Playoffs, siendo una de las razones principales de que su equipo venciese en las eliminatorias contra los Mavericks y los Clippers.

Pero lo cierto es que la escuadra que dirige Kevin McHale tiene el talento de sobra para convertirse en claros aspirantes al anillo de campeón en esta campaña.

Evidencia es que el año pasado consiguieron el mejor segundo mejor récord de la Conferencia Oeste igualado con los Angeles Clippers con 56-26. Fueron superados por los actuales campeones de Golden State Warriors con 67-16.

Una vez más el conjunto con sede en Houston, Texas, contra con sus superestrellas James Harden y Dwight Howard, además de otros jugadores con proyecciones para dar el suplemento que necesita la escuadra en el tabloncillo para alcanzar su objetivo.

Ellos añadieron durante la temporada muerta a armador Ty Lawson, además de Marcus Thornton y a las elecciones del Draft 2015 –Sam Dekker y Montrezl Harell-.

Cabe señalar que obtener un anillo no es nada fácil, por lo que deben contar con varios aspectos del juego para alcanzar su anhelado sueño.

Aunque lo cierto es que el conjunto de Kevin McHale se encuentra en la división más dura de toda la NBA, donde es posible que los cinco equipos de la división lleguen a disputar los Playoffs, como ya sucedió la temporada pasada. Nos referimos a Memphis. San Antonio, Dallas y New Orleans.

James Harden volverá hacer su luminaria a la hora de anotar puntos se refiere con promedio de 27.4 por juego, segundo mejor de la liga detrás de Russell Westbrook , quien tuvo 28.5.

Pero lo más llamativo de este escolta es su forma de poder penetrar con el balón hacia el canasto y encestar su disparo sin importancia a qué distancia esté del aro.

El centro Dwight Howard es la otra gran figura que tiene el quinteto. Como dijimos anteriormente, su escollo podría ser su salud, la cual el año pasado su peor enemigo. El promedió 10.5 rebotes por partido, 15.8 puntos y 1.3 bloqueos. Su poder debajo del poste es intimidante para cualquier oponente.

Su nuevo armador Ty Lawson llegue al conjunto con excelente credenciales de ser un gran manejador del balón procedente de Denver Nuggets. Evidencia es su promedio de 9.6 balones repartidos por juego, además de su alto average de puntos de 15.2. El bien podría cambiar el sistema erróneo de pérdida de balones que tuvo la escuadra texana el año pasado, el cual fue su enemigo mortal. El gran problema del rápido jugador es su problema de conducir ebrio. El fue multado en dos ocasiones por manejar borracho.
Terrence Jones volvió a resolver en el tabloncillo. El ala-pivot tuvo promedio de 11-7 puntos y 6.7 balones atrapados, además de la confianza que brinda a la escuadra.

El quinteto lo completa Trevor Ariza, quien fue otro de los jugadores claves en el éxito que tuvieron los texanos. Solo basta con mirar sus 12.8 puntos por partido, 6.2 rebotes y 2.5 asistencias, estadísticas que hablan lo que fue en el tabloncillo

La banca está bien reguardada con Corey Brewer, Jason Terry, Marcus Thornton, K.J. McDaniels, Sam Dekker, Donatas Motiejunas y Montrezl Harrell.