Los usuarios de los servicios públicos domiciliarios son los más desprotegidos en nuestro país

Mi única hermana vive sola, su consumo de energía oscila entre los 800 y mil pesos mensuales porque ella sale a trabajar desde temprano en la mañana y regresa en la noche, por lo que utiliza la energía unas tres horas en las noches de los días laborables y los fines de semana.
Su consumo es mínimo, apenas posee un abanico, las bombillas para iluminarse y un televisor pequeño. Resulta que en el mes de octubre el recibo de la luz le llegó de 13 mil pesos y en noviembre de 14 mil, lo que motivó que fuera a reclamar a la prestadora EDESUR, donde recibieron la reclamación y le dijeron que “investigara” si alguien se había conectado al cable que lleva la energía a su apartamento. Ella pagó a un técnico privado, quien detectó que había por lo menos tres personas “pegadas” a su medidor. De ahí fue al departamento de fraude, llevó sus evidencias y dos semanas después notificaron a los “ladrones”, los cuales no han acudido a la fiscalía anti fraude.
Como es natural fue a PROTECOM, de esa entidad fueron a evaluar y concluyeron que no debía pagar más de 500 ó 600 pesos por el servicio.
Ya en enero, le ha llegado otro recibo, ahora de 5 mil pesos, parece que alguien ya se desconectó y por eso bajó la factura de 14 a 5 mil pesos. Esta semana fueron de la prestadora y le suspendieron el servicio, pese a que tiene una reclamación en PROTECON y una prueba de fraude.
El alegato para la suspensión es que ella no había hecho la reclamación por la última factura, la de 5 mil pesos, y debía pagar el importe de enero, pese a que no ha finalizado el mes. Ella pagó su factura en el acto, pero no le repusieron el servicio porque debía hacer la reclamación. Hizo la reclamación y pagó pero no le repusieron el servicio de inmediato, sino dos días después.
Escribo de esto porque estoy segura que muchas personas son víctimas de un mal servicio. En las EDES, si su consumo baja de repente le notifican un fraude al dueño de la cuenta sin previamente investigar.
Antes de que mis hijos se fueran de la casa nuestro consumo era muy alto, cuando todos se fueron (son tres) el consumo bajó en un 50 por ciento e investigaron la razón de la baja en la factura, sin embargo, a mi hermana le subió y sin más le facturaron sin investigar nada.
Lo más grave es que, cuando se origina un cambio en el consumo, EDESUR envía a sus técnicos, que se limitan a ver el medidor y reportar lo que ven, siendo ratificada la factura sin que se haga una investigación a fondo, sobre todo si es hacia el alza.
El caso es que desde finales de noviembre mi hermana tiene un conflicto que no provocó y que todavía no le han resuelto, pese a que ella llevó las evidencias de que le estaban robando la luz de manera descarada.