Los vehículos de carga que circulan de forma indebida representan otro de los peligros del tránsito en la capital. Es común ver en las vías camiones sin protección de la mercancía, con neumáticos en mal estado y en pésimas condiciones mecánicas.

 Por demás, muchos camioneros son temerarios  y conducen a altas velocidades en  plena ciudad y regularmente no son detenidos por  agentes  de la Autoridad Metropolitana de Transporte (Amet) cuando cometen faltas.

Esa situación se puede contactar en diferentes vías sobre todo, en las que dan acceso a los pueblos del interior y a los puertos.

Algunas de las mejores referencias son  el Malecón de Santo Domingo, la autopista 30 de Mayo,   las avenidas Gregorio Luperón, John F. Kennedy, entre otras.

 En el caso del  Malecón esta vía ha sido convertida en predilecta de los camioneros para el desplazamiento este-sur del país, lo que incide considerablemente en el congestionamiento del tránsito a diferentes  horas del día, pues el transporte de carga se hace en cualquier horario.

Además, cuando llueve la situación se torna más peligrosa, pues en el Malecón se hacen grandes charcos  y cuando los camiones y patanas  cruzan a alta velocidad, como es común, levantan una ola de agua que cubre la visibilidad a los conductores de vehículos más pequeños.

Recientemente, un conductor perdió el control por esta situación y casi cae en el mar junto a su vehículo.

Protección.  En el caso de las cargas  mal protegidas es notorio  con los  camioneros que transportan materiales de la construcción, ya que pequeñas rocas caen hacia los vehículos cercanos, afectando sus cristales.

Incluso, las piedrecillas  a veces les caen a conductores o pasajeros de otros vehículos que andan con los cristales bajos.

También se han dado casos de otras cargas que han caído desde los camiones  hacia otros vehículos, como sucedió hace poco  en la Kennedy cuando el carro que conducía una señora fue impactado por un tope de un escritorio que cayó desde un camión. Por suerte para ella el  objeto solo chocó en la puerta.

Otro de los problemas de los vehículos de carga es la falta de protección a los ayudantes que en muchos casos van encima de la carga o detrás en posiciones casi “suicidas”.  Algunos hasta van durmiendo en esa incómoda situación.

Además, cuando esos vehículos van a descargar mercancías toman calles y aceras sin previo aviso, afectando la circulación.

Zoom

Violan normas

Pese a que la circulación de vehículos de cargas  está restringida  en zonas residenciales, al menos que se lleve alguna mercancía, se hace común ver camiones transitando en calles estrechas.

Tragedia

Justo el  martes un camión perdió el control en una zona residencial de Villas Agrícolas en la capital,  mató a tres personas y afectó viviendas cercanas al accidente.

Cristales

Son muchos los conductores que han tenido que cambiar el cristal delantero por haberle caído alguna piedrecilla desde un camión que primero ocasiona una pequeña fisura hasta que poco a poco se rompe todo el cristal. Los camiones   por tanto que deben proteger bien su carga.