El amor filial motivó al dirigente Lou Piniella a dejar atrás una carrera de 48 años en el béisbol profesional, para dedicarle tiempo a su madre, quien sufre graves problemas de salud.

Louis Víctor Piniella nació el 28 de agosto de 1943 en Tampa, Florida, lugar donde dio sus primeros pasos en el deporte del bate y la pelota.

Piniella asistió a la escuela Jesuita y luego ingresó a la Universidad de Tampa. A los 18 años de edad fue firmado por los Indios de Cleveland, equipo que lo cedió 5 meses más tarde a los Senadores de Washington.

En Washington, permaneció casi dos temporadas en los circuitos minoritarios y pasó vía cambio a los Orioles de Baltimore, organización que le dio el chance de debutar en las mayores el 4 de septiembre de 1964.

Sin embargo, el conjunto de Baltimore no le otorgó el tiempo de juego que cualquier novato desearía y el jardinero   fue devuelto a las menores.

Allí duró dos temporadas más, para después ser transferido al equipo que lo firmó como profesional: Indios de Cleveland.

Piniella comenzó a desesperarse y demostró un carácter explosivo por su hambre de retornar a las Grandes Ligas. En la sucursal AAA de Cleveland, bateó .289, 7 jonrones y 52 empujadas, números que no convencieron a la organización de llevarlo de vuelta a la gran carpa.

Entre 1966 y 1967, Piniella quemó con promedios de .308 y .317, cifras que demostraron el potencial de pelotero que tenía. En 1968, lo subieron al equipo grande, pero no bateó de hit en 5 visitas al plato.

El 15 de octubre de 1968  hubo una expansión en las Grandes Ligas y Piniella fue tomado por los Pilotos de Seattle, organización que lo cambió un año después  a los Reales de Kansas City.

Luego de siete campañas en las menores, Piniella consiguió la oportunidad deseada y logró jugar en 133 partidos con los Reales, conquistando el premio de Novato del Año. Promedió .282, 11 cuadrangulares y 68 remolcadas. Desde esa temporada, jamás retornó a las menores hasta su retiro como jugador en 1984.

Se caracterizó por ser un bateador de contacto, que conectaba bien la bola hacia la banda contraria,  a veces con poder. Siempre se mantenía pendiente a las situaciones pequeñas del juego, condición que lo llevó a ser  exitoso luego como dirigente.

Al terminar su carrera con los Yanquis de Nueva York, Piniella se unió al cuerpo de coaches como instructor de bateo.

En 1986, los Mulos del Bronx le dieron la confianza de iniciar su carrera como piloto, oportunidad que  pasó con buenas calificaciones. Terminó con marca de 90-72 y quedó en segundo lugar en el nuevo circuito.

Sin embargo, el entonces dueño de los Yanquis, George Steinbrener no quedó muy contento, ya que el triunfo era su receta preferida.

  Piniella volvió a dirigir la siguiente temporada y finalizó en cuarto lugar, con récord de 89-73.

La paciencia del “Boss” se colmó y  Piniella pasó a ser gerente general  para 1988.

  Steinbrener canceló  al nuevo dirigente Billy Martin el 23 de junio  y Piniella tomó otra vez las riendas. Finalizó la temporada con marca negativa de 45-48, en quinto lugar.

Tras concluir la campaña, Piniella permaneció un año fuera del terreno de juego.

Los Rojos de Cincinnati lo contrataron  al concluir la temporada de 1989 y, en su primera temporada con el nuevo conjunto, conquistó su único título de Serie Mundial como dirigente. En esa oportunidad,  el equipo se enfrentó a los Atléticos de Oakland y el dominicano José Rijo se alzó con el premio de Jugador Más Valioso. Piniella duró dos temporadas más en Cincinnati y luego pasó a los Marineros de Seattle, Tampa Bay,   concluyendo su carrera con los  Cachorros de Chicago. Durante su trayectoria  obtuvo 1,835 victorias, para ubicarse en el lugar 14º de todos los tiempos, detrás de varios  activos como Tony LaRussa, Bobby Cox y Joe Torre . 

La frase

Lou Piniella

Mi madre me necesita en casa. No ha mejorado nada desde que estoy aquí. Ha tenido algunas otras complicaciones y en vez de estar viajando a casa y regresar, creo que no es justo ni para el equipo ni para los jugadores. Por ello, pienso que lo mejor será dejar el cargo e irme a casa para cuidar a mi madre”.

Las claves

1. Pieza importante

A mediados de la década del ‘70, el jugador Piniella fue pieza importante al defender los jardines de los Yanquis, junto a Mickey Rivers   y Reggie Jackson. Ganó 2 anillos.

  2.  Controversial

Como dirigente, Piniella discutía cualquier jugada dudosa y lanzaba las bases fuera del terreno de juego. En una ocasión se la llevó. 

Antecedentes

Consumo de marihuana

28 de junio de 2009

 El ex dirigente de los Cachorros, Lou Piniella, admitió haber consumido marihuana una vez en su vida, esto para defender al receptor Geovany Soto, quien arrojó positivo a marihuana en las pruebas administradas durante el Clásico Mundial de Béisbol. Piniella, con esa declaración, intentó minimizar la situación de Soto, quien aseguró que sólo  había consumido narcóticos en un esa oportunidad.

Juegos de Estrellas

1972 y 1991

Lou Piniella participó en dos clásicos de media temporada, uno como jugador de la Liga Americana y otro como piloto de la Liga Nacional.

Futuro Salón de la Fama

Sólo será cuestión  tiempo  para que Piniella sea inmortalizado como dirigente.