Los sueños nos ayudan a generar metas: debes aprender a definirlos

“Es mejor perseguir un sueño que rendirse a no tenerlo. Prefiero perseguir utopías.” Julia Navarro
Indiscutiblemente esta frase nos lleva a pensar en nuestros sueños, proyectos, visión y trayectoria de nuestra vida. Perseguir nuestros sueños siempre valdrá la pena aún teniendo caídas pesadas y posiblemente muy grandes.

Pero la grandeza no está en la caída sino en la valentía de reconocerla y vencerla al levantarse siguiendo el camino que te lleva a la meta anhelada.

Para conseguir tus sueños, debes tener bien claros cuáles son y después, ¡luchar por conseguirlos! No se consiguen de la noche a la mañana, a veces, tomará meses e incluso años, pero merece la pena concentrarse en un objetivo para alcanzarlos.

Nuestros sueños nos ayudan a generar nuestras metas, y por ello debes luchar por tus sueños y aprender a definirlos para que nuestras acciones estén siempre encaminadas hacia ellos.
En ningún momento se ha dicho que el triunfo no pasa por las pruebas ni las dificultades para lograr su cometido, de hecho los mejores logros en términos de permanencia han sido aquellos que han pasado por los peores momentos, porque el factor dorsal es la perseverancia.

Cuando pienses que estás derrotado no confundas una batalla con la guerra, es imprescindible pisar el primer escalón para llegar a la cima.

Puedes hacer paradas sin dejar de continuar de seguir el objetivo principal; el camino al fin claro y propuesto. Vas a encontrar en la vía muchas piedras que te harán tropezar, lluvias, estruendos, relámpagos con grandes ráfagas escandalosas, vistas oscuras, direcciones grises pero tu corazón estará apegado al sueño deseado, a la felicidad incansablemente buscada, y al éxito posible sorprendentemente encontrado. La voluntad está dentro de ti, debes enfrentar con coraje todos los obstáculos sin dejar de reconocerle su importancia.

Cambia el pensamiento de trabajar para comprar cosas que realmente no necesitas y reestructura tu vida para que el trabajo sea simplemente un medio que te permita alcanzar tus objetivos. El placer de perseguir y trabajar para conseguir un sueño no se encuentra en la meta. El mayor placer se produce durante el camino. El sueño alimenta nuestra acción, y nos ayuda a saborear cada paso como una victoria.

La lucha por un sueño es lo suficientemente importante y motivador como para trabajar en la consecución del mismo, sin importarnos lo que los demás piensen u opinen sobre nosotros. Nos permite generar la independencia que necesitamos. Vivir la vida en persecución de los sueños nos dará la fortaleza y la razón para vivir en búsqueda de la felicidad.

Existen 3 claves fundamentales del éxito y son aquellas que tienes que tener presente si finalmente decides fluir hacia tus sueños. Una, la constancia, para continuar dando pequeños pasos hacia tu meta, dos, estrategia, para saber hacia qué dirección tenemos que dar estos pasos, y flexibilidad para ser capaces de dar la vuelta o de inventar nuevos caminos en caso necesario.

Para terminar quiero compartirte esta hermosa lectura poética escrita por la gran mística española Teresa de Ávila, una de las mejores maestras de la vida espiritual de la Iglesia. Es considerada la primera gran escritora en lengua castellana, y sus escritos son un modelo seguro en los caminos de la plegaria y de la perfección.

Nada te turbe,
Nada te espante,
Todo se pasa,
Dios no se muda,

La paciencia
Todo lo alcanza;
Quien a Dios tiene
Nada le falta:
Sólo Dios basta!