Roma, (EFE).- El tenor italiano Luciano Pavarotti, convaleciente en su villa de Pesaro (Costa Adriática) tras ser operado el mes pasado de un cáncer de páncreas, asegura que ve las cosas “con serenidad” y que es y será “optimista hasta la muerte”.

En una entrevista que publica el diario Corriere della Sera, el cantante, que el próximo 12 de octubre cumplirá 71 años, sostiene que ha sido un hombre “afortunado y feliz hasta los 65 años”. “Luego llegó este revés. Y ahora estoy pagando el tributo de aquella fortuna y felicidad. Pero encuentro alimento en mi infancia, que fue pobre y feliz, y veo las cosas con serenidad”, señala.

El tenor fue intervenido a principios de julio en un hospital de Nueva York para extirparle un tumor maligno en el páncreas, tras haber sufrido en los meses anteriores diversos problemas de salud.

“Pero soy y seré optimista hasta la muerte. Lo he aprendido de los míos, de mi padre y mi madre que se fueron hace cuatro años, con cuatro meses de diferencia el uno del otro”, apunta Pavarotti.

“La alianza de los Tres Tenores -pese a la enfermedad- no se ha disuelto. Plácido Domingo ha venido a verme un par de veces, José Carreras me llama por teléfono. Fue una bella gran temporada, la nuestra”, dice, en alusión al éxito que, a partir de 1990, le lanzó completamente al estrellato junto a los dos españoles.  Agrega, no obstante, que en las condiciones actuales él prefiere no escucharse más a sí mismo en ninguna grabación.

 “Si me invitaras a cenar y, para agradarme, pusieras una grabación mía antigua, te dejaría plantado de inmediato”, advierte. Y añade: “Si quieres que me quede, hazme oír la voz de Plácido (Domingo)”.