Omitió los temas nodales de seguridad, haitianización y otros
En su debut presidencial este agosto l6, Luis Rodolfo Abinader Corona enfatizó la corrupción, como ningún gobernante que memorice, cargando el mayor tiempo de sus 43 minutos gesticular airado, con el índice derecho recto, los lineamientos del teleprompter reiterativos:
“Quien haya robado los dineros del pueblo antes y ahora, irá a la justicia”, y cuando posesionó luego a las magistradas Miriam Germán y Yeni Berenice Reynoso, procuradora general y procuradora adjunta de la República, fue claro al señalarle en lo sucesivo, atenerse a la Constitución y las leyes, sin intervenir una llamada suya, como accionaron todos sus antecesores.
El gran ausente en la solemnidad de juramentación sin dudas fue el expresidente Leonel Fernández, principal indirecto aliado de Abinader, factor determinante de su triunfo, al derricar del poder al PLD.
El flamante presidente Abinader omitió los temas nodales de seguridad, haitianización que socava soberanía, y rescate del medio ambiente, observando que el presidente Abinader, que recuerde, nunca abordó la invasión pacífica de cientos de miles de haitianos iniciada por Leonel Fernández y profundizada por Danilo Medina, sin desmarcarse de éstos.
Recordamos invitación hace dos años formuló Abinader a Rudolph Guiliani, ex alcalde de Nueva York, que controló el crimen, la prostitución de la calle 42 y los vagabundos y mendigos del Bowery en La Gran Manzana, en rol de consultor de seguridad, demostración de interés por el tema, omitido en toma juramentación.
Restaurar los degradados afluentes Ozama, Isabela, Higuamo, Yuna, Camú, Nizao, Yaque del Norte, sus cuencas hidrográficas, y cientos de cañadas que polucionan sus cauces, fue tema silenciado por el presidente Abinader, sin que necesariamente revele no disponer de planeamientos para superar las tres omisiones, porque aún empieza, y por eso, precisa explicar al país sus providencias.