Luis Álvarez Renta, quien está condenado a 10 años de prisión por el desfalco del Banco Intercontinental (BANINTER),  llegó hoy en camilla, desde la cárcel de Najayo, a la audiencia celebrada en la Octava Cámara Penal del Distrito Nacional.

Durante la audiencia, presidida por el magistrado Teófilo Acosta,  la defensa mostró certificación médica que indica que al economista la presión arterial le subió de 150 a 170.

«Me subió la presión muchisímo. Pero lo que querían hacer era este aparataje. Estoy en esta camilla, no porque no pueda caminar, sino porque por problemas de la columna vertebral no puedo estar sentado», declaró el recluso.

El motivo de la comparecencia es el conocimiento de un recurso de amparo interpuesto por él, en demanda de que se cumpla la sentencia  del entoces Juez de la Pena de San Cristóbal, Jose Ignacio Medrano Queliz, en la cual se le concedía el arresto domiciliario.

Se recuerda que los abogados del exbanquero habían informado que la salud de su defendido había desmejorado desde hace unos meses. Incluso  estuvo interno, en una clínica la capital, por complicaciones derivadas de la diabetes e hipertensión arterial.

El magistrado Acosta ordenó que Álvarez renta regresara a Najayo y que la aaudiencia de hoy se realice sin su presencia.