Marco Tulio Cicerón, pensador romano, afirmó que “La vida de los muertos perdura en la memoria de los vivos”, y cuando se trata de los artistas eso es aún más cierto, ya que su obra los hace imperecederos.

A dos años de su muerte, el denominado “padre del rock dominicano”, Luis Días, sigue bailando en las calles de noche y de día cuando en una vellonera de su tan añorada Zona Colonial suena “El guardia del arsenal”, “Mi guachimán” u otro de sus éxitos.

“El Terror” vive en cada carnaval cuando las comparsas se hacen acompañar de ese himno escrito por él y popularizado por Fernando Villalona, “Baile en la calle” o  en la voz de Sonia Silvestre mientras interpreta sus canciones.

Recordándolo.  El cantautor dominicano Víctor Víctor afirma que Luis se ha mantenido muy presente en la población dominicana y en la mente de muchos músicos que hicieron escuela con él.  Sin embargo, el compositor exhorta a dar a conocer a la población de muchas cosas que él hizo pensando en la gente.

“Las dificultades en la industria del disco impiden que los ideales   de Luis sean más escuchados; no obstante, creo que hay que mantener  en la memoria su música y sus motivos de inspiración”, señala Víctor.

El compositor de “Mesita de noche” revela que Días llamó la atención del grupo de músicos de su generación hacia la bachata.

“Él fue el primero que nos mostró las posibilidades, no de reproducir lo mismo que hacían los fundadores de la bachata: El Añonaito, Calderón y otros, sino la capacidad de mezclar su música rockera con la bachata, y por él muchos vimos un horizonte en ese género musical”, confiesa.

Asimismo, considera que el gran legado que este músico oriundo de la provincia Monseñor Nouel le deja al país es “su música, rica en géneros, innovadora y futurista para su época, ya que refuerza el sentido del nacionalismo y la identidad dominicana”.

La poeta y periodista Marivell Contreras asegura que Luis Días es una pieza clave del encuentro de nuestra música con sus raíces.

“No podemos quedarnos solo en la sonoridad, que nadie  trabajó con más apego que él, sino ver además  que le aportó el uso del lenguaje común del pueblo poniéndole voz a los campesinos, a los muchachos del barrio, a la vida -en fin- de los barrios, los campos y las zonas urbanas”, puntualiza la comunicadora.

La escritora considera que Días le dio  color al ser dominicano en todas sus dimensiones. “Su visión, osadía e irreverencia cambió totalmente el panorama del merengue, la bachata y el rock en República Dominicana”, manifiesta.

Muerte.  Luis Días, quien nació el 21 de junio de 1952, murió en Santo Domingo el 8 de diciembre de 2009, luego de sufrir un ataque al miocardio y padecer otras complicaciones.

Al rockero y folklorista le sobreviven dos hijos.

Las frases

Luis Días

Aprovechen el tiempo al máximo, estudien, que el objetivo es la alegría y la libertad”.

 Lograr un cambio de actitud, tanto dentro como fuera del país, de la imagen de los dominicanos, algo por lo que he luchado toda mi vida. Y que nuestros representantes no sean políticos mafiosos que cada cierto tiempo se confabulan para engañar al pueblo”.

Deseo que algún día mi país esté libre de opresión, de todo recuerdo de dictadura.

La tenacidad. Creer firmemente en sus convicciones sociales y políticas… ¡Y mucha práctica!