Sao Paulo. El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, preso por corrupción, afirmó en una entrevista televisiva que solo quiere salir de la cárcel con un «100 % de inocencia” y por eso no pedirá a la Justicia una reducción progresiva de su condena.
“Solo quiero salir con un 100 % de inocencia y desde aquí adentro voy a probar que ellos (el exjuez y ministro de Justicia, Sergio Moro, y el fiscal jefe de la operación ‘Lava Jato’, Deltan Dallagnol) son bandidos y yo no. Es eso lo que quiero probar”, dijo Lula al canal en Youtube del periodista y escritor Bob Fernandes.
Lula cumple una pena de ocho años y diez meses por corrupción y lavado de dinero en la sede de la Policía Federal (PF) de Curitiba, capital del estado de Paraná (sur) y donde se concentran las investigaciones de la operación anticorrupción ‘Lava Jato’ La entrevista, retransmitida por la TVE Bahía, fue la primera concedida por Lula después de que de la jueza de primera instancia Carolina Lebbos, encargada de la ejecución de la pena, ordenara hace una semana su traslado a una prisión de Sao Paulo, una decisión que fue derogada por la Corte Suprema.
“Significó (la decisión de su traslado) la necesidad de librarse de Lula antes que él pueda salir de aquí. No conozco a la jueza, pero ella fue irresponsable. Espero que la sociedad esté viendo. No quiero ser tratado mejor ni peor que nadie”, apuntó Lula.
El exmandatario (2003-2010), que defiende ferozmente su inocencia y cuestiona las pruebas del proceso en el que se le condenó por recibir como parte de las coimas de constructoras un apartamento en la playa y una casa de campo, aseveró que está encarcelado porque quiere, pues tuvo muchas oportunidades para salir del país.
“Yo quiero salir de aquí con el 100 % de inocencia. Estoy aquí porque quiero. Yo podría haber salido de Brasil. Tuve muchas oportunidades. No quise salir porque la forma de ayudar a poner bandidos detrás de las rejas es estar aquí”, reiteró.
El líder del opositor Partido de los Trabajadores (PT) criticó la acción de la Policía que después de su arresto confiscó hasta las tabletas digitales de sus nietos, diferente del expresidente de la Cámara de Diputados Eduardo Cunha, también preso, al que no le retuvieron el teléfono móvil por una supuesta orden de Moro. ¿Qué tenía el teléfono de Eduardo Cunha que Moro (entonces juez de la ‘Lava Jato’) no quería que nadie supiese? ¿Por qué ellos no aceptaron una delación de Eduardo Cunha?”, cuestionó Lula, para quien Estados Unidos, interesado en el petróleo, está detrás de la operación anticorrupción iniciada en la estatal Petrobras.
Sobre el actual presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, Lula lo calificó como “un monstruo que surgió” cuando la poderosa red de comunicaciones Globo no consiguió poner como candidato presidencial al presentador Luciano Huck.
También se refirió a las declaraciones de Bolsonaro sobre la derrota en las elecciones primarias de Argentina de su amigo y actual presidente Mauricio Macri y las críticas del mandatario al candidato vencedor Alberto Fernández. «Él (Bolsonaro) tuvo la insensatez de hablar mal de un aliado estratégico y de ofender al pueblo argentino”, al referirse que con la llegada de Fernández al poder Argentina se convertiría en una nueva Venezuela en la región, concluyó Lula.