El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, defendió que es necesario combatir los subsidios agrícolas de los países ricos, para enfrentar el hambre, durante una cumbre virtual convocada por México para tratar la inflación.

“El hambre es el resultado perverso de decisiones políticas irresponsables y criminales”, dijo Lula en la reunión, según un comunicado de la Presidencia brasileña.

Lula, que participó por videoconferencia en la reunión, también resaltó la necesidad de “agregar valor a las cadenas regionales de producción de alimentos”, como estrategia para garantizar la seguridad alimentaria.

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Asimismo, ofreció la disposición de Brasil para compartir su experiencia con políticas públicas de seguridad alimentaria, que llevaron al país a eliminar el hambre en 2014, aunque ha vuelto a empeorar en estos indicadores en los últimos años.

En la llamada cumbre antiinflacionaria, convocada por México, participaron el presidente anfitrión, Andrés Manuel López Obrador, y los líderes de Argentina, Brasil, Belice, Bolivia, Chile, Colombia, Cuba, Honduras, San Vicente y las Granadinas y Venezuela.

Estos países alcanzaron siete acuerdos para combatir la inflación y facilitar el comercio regional, que incluyen la creación de un grupo de trabajo técnico con representantes de los Gobiernos de cada nación para determinar las medidas de cooperación.

Las naciones participantes también pactaron empujar medidas logísticas y financieras que permitan el intercambio de productos de la canasta básica y bienes intermedios en mejores condiciones, tomando en consideración la realidad de cada país y con la prioridad de abaratar los costos.