POR CLARA SILVESTRE
Diversidad de diseños, colorido y variedad, evidentemente van relacionados cuando de arte vitral se trata. Es que el vitral ofrece tantas posibilidades que sin mayores inconvenientes puede colocarse en cualquier lugar de la casa sin que necesariamente se corresponda con el estilo que prevalece.

Se trata de un arte con movimiento, que necesariamente deja al descubierto que fueron manos artistas quienes lo realizaron. Precisamente por el encanto de estas piezas de colores, es que Wilson Soto quedó atrapado desde hace 15 años cuando comienza en este interesante arte. Desde entonces crea una gran variedad de diseños para satisfacer los gustos de sus clientes.

Si se hace una retrospectiva en lo que respecta al arte vitral, necesariamente habrá que realizar un alto en Constantinopla, porque como gloria del arte bizantino se resguarda las historias de emperadores y escenas del cristianismo, que están matizadas por la riqueza y el esplendor.

Según explica Wilson Soto, los primeros vitrales fueron elaborados en Europa durante el siglo XI, para la Catedral de Augesburg, ubicada en Alemania; pero enumera como más influyentes los diseñados en las catedrales francesas de Chartres y Saint Denis, y la Saint Chapelle de París, que datan de los siglos XII y XIII.

«A pesar de los años, por su belleza, construidos con miles de fragmentos de vidrios de colores, que presentan escenas bíblicas y paisajes de la vida de Cristo, éstos tenían no solamente un fin educativo, otros adornaban edificios públicos y palacios, con dibujos y diseños en óleo heráldicos y con escenas de leyendas y motivos de guerreros o caballería», dijo.

Indica que cuando se terminaron las construcciones de catedrales góticas, los vitrales se relegaron a un segundo plano, y su resurgimiento no se apunta sino hasta finales del siglo XIX y principios del XX, cuando el movimiento artístico Art Nouveau, los retoma con nuevos diseños innovadores de figuras femeninas, flores, ramas y hojas.

Como un gran aporte en el arte vitral menciona al pintor y vitralista estadounidense Luis Confort Tifany, quien creó un tipo de vidrio iridiscente de acabado satinado y bellísimos colores.

Destacó que los primeros vitrales se realizaron con piezas de vidrios pintados con óleo y unidas entre sí por una cañuela de plomo que sujetaba la unión entre ambos vidrios, por lo que se les llama emplomados. Actualmente se utilizan tanto el plomo como el estaño.

FICHA

Wilson Soto lleva más de 15 años trabajando con el vitral. Luego de trabajar en importantes talleres de artesanos, entiende que puede independizarse y crear su empresa, de ahí surge D´Wilson Vitral.

Con su eslogan «Marcando la diferencia en cada espacio de su hogar», y con el deseo de ofrecer un excelente servicio, se ha empeñado también en disponer de una gran variedad de servicios, estos son: lámparas Tiffany, vitrales artísticos decorativos, cúpulas en vitral, accesorios en vitral como tarjeteros, servilleteros, portarretratos, apliques, entre otros. Además, grabados, puertas y ventanas corredizas y decoración de interiores.