La distribuidora  Luz y Fuerza de Las Terrenas reiteró que el superintendente de Electricidad Francisco Méndez ha mantenido una “inexplicable persecución” contra esa compañía en los últimos años con actuaciones que desnaturalizan el rol de ese organismo.

Afirmó que las acciones de Méndez benefician a la empresa de su competencia Progreso El Limón, que no cuenta con capacidad propia de generación y depende de la energía subsidiada a través de la Distribuidora del Norte (Edenorte) y que ni siquiera tiene permiso de operación otorgado por una autoridad competente, lo que constituye  una violación fragrante a la Constitución y a las leyes.

Apuntó   que la compañía “apadrinada” por el superintendente tampoco dispone de la capacidad de potencia que requieren los proyectos turísticos de la zona y sin embargo, “  el ingeniero Méndez el 29 de marzo del 2010 convocó a la sede central de la Superintendencia de Electricidad a los desarrolladores de las playas del Astillero y del Limón para que esa compañía pudiera instalar un sistema trifásico,  servicio que Luz y Fuerza ya estaba en capacidad de ofrecer   sin solicitar un centavo adicional”.

Agrega que el funcionario   ha mantenido una disposición en contra de Luz y Fuerza desde el  2008 que le impide trabajar  en el área comprendida  entre La Barbacoa y El Astillero,  bajo el argumento de que existe un conflicto entre dos distribuidoras  que operan en la zona.

Sin embargo, dice que la empresa, ha permitido operar a la compañía Progreso El Limón con entera libertad.