El ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Bautista Rojas Gómez, consideró que los ayuntamientos de los municipios que han sido intervenidos de urgencia por el cúmulo de basura, deberían reponer el dinero invertido a las instituciones que han asumido la labor que le corresponde a ellos.
El funcionario habló ayer luego de iniciado el acto con que fue celebrado el Día Mundial del Medio Ambiente y Día Amigable de la Familia con el Ambiente, encabezado por el presidente Danilo Medina en el Parque del Este.
Por segunda ocasión en un período de año y medio el municipio de San Cristóbal, esta vez junto a Santiago, debió ser socorrido por instituciones del gobierno central debido a los montones de desechos solidos amontonados por doquier y que representaban una amenaza a la salud de los moradores de ambas localidades.
Rojas Gómez aseguró que esta situación es producto de la irresponsabilidad, por lo que entiende los cabildos deberían pagar las consecuencias.
En las labores de rescate interviene personal del Ministerio de Obras Públicas y Salud y organizaciones comunitarias.
“Si a mí me preguntaran qué hacer, yo le descontaría del subsidio que reciben los ayuntamientos los gastos en que incurran las otras instituciones del gobierno en la recuperación de esos sistemas”, planteó el ministro.
Aunque no ofreció una cifra estimada del monto que implica la intervención, explicó que desplazar 100 vehículos pesados a diario más el personal, es bastante costoso, por lo que esos cabildos deberían pagar el dinero que está destinado a la recogida de los desechos.
Dijo esperar que estas actuaciones irresponsables no se repitan.
Drones para depredadores. A propósito de la fecha, Rojas Gómez indicó que vigilan con drones los parques nacionales, sobre todo las zonas altas como Constanza, para evitar la tala de árboles y controlar la actividad agrícola.
Indicó que continúan los trabajos de recuperación del Parque Valle Nuevo, que ha iniciado con una siembra de más de 100 mil plantas. Sin embargo advirtió que la recuperación total tardará años. Áreas protegidas de la zona, vitales para la producción de agua, han sido impactadas por la construcción de proyectos turísticos y la agropecuaria.