El procurador general adjunto Ramón Arístides Madera confirmó ayer que desconocidos intentaron atentar en su contra el  domingo, cuando salía de la clínica Corazones Unidos.

El magistrado, cabeza de la investigación de la muerte de los presuntos secuestradores de Eduardo Baldera, dijo que desconoce si se trata de alguna presión para intentar amedrentarlo o delincuencia común, “pero  nadie me va a doblegar, no acepto presión de ningún sector”, señaló.

  Madera dijo que actúa siempre con responsabilidad y transparencia y en el curso de la investigación que desarrolla precisó que asumirá su rol “píquele a quien le pique y duélale a quien le duela”, insistió.

Según el magistrado los desconocidos lo siguieron hasta Corazones Unidos  y alrededor de las 7:00 de la noche uno trató de acercársele pero se detuvo al verle empuñar su arma.

La clave

Sobre la investigación

En  torno al desarrollo de la investigación  del caso, el magistrado Madera dijo que la Comisión quedó ayer a la espera de que le fuera llevado el teniente coronel (PN) García Lebrón señalado como quien  supuestamente distribuyó dinero para acallar informaciones sobre el secuestro deBaldera en Villa Vásquez.