Miguelina Jourdain, madre del niño Rafael Jourdain, desaparecido desde el pasado sábado, afirmó hoy que no aceptará que el cadáver de un menor de la misma edad hallado a orillas del río Isabela, es el de su hijo, hasta tanto no concluyan las pruebas de ácido desoxirribonucléico (ADN).

Aunque reconoció que el cuerpo presenta algunas características, como una mancha similar a la de su hijo y un trauma en la dentadura, esperará por los resultados de la investigación que realiza el Instituto de Patología.

Miguelina, quien es madre también de dos niñas de 14 y 11 años, manifestó que se siente muy enojada y decepcionada con el tratamiento dado por algunos medios de comunicación a sus declaraciones, la cuales en algunos casos han sido sacadas de contexto.

«Han dicho que soy la responsable de la muerte de mi hijo, que no es cierto que el estaba jugando cuando fue raptado, y ha salido hasta que yo me había ahorcado. Es indignante que el dolor de una madre se tome para hacer prensa amarillista» expresó.

En ese sentido, pidió a los medios y a la opinión pública no creer  nada que no sea una versión suya o de la Policía Nacional, cuyo departamento correspondiente está manejando el caso como una acción criminal.

Jordain llamó a los medios de comunicación a dejar de difamar a su familia, publicando falsas informaciones.

Cuándo desapareció el niño. Según narró a reporteros de HOY, al momento de la desaparición de su niño, él jugaba con otro de tres años de edad, en un patio que queda dentro del edificio, y de ahí, lo sacaron por la parte de atrás, la cual estaba sellada con hojas de zinc.

«Estas hojas tuvieron que haber sido  abiertas por un adulto», dijo al tiempo que mostraba el lugar a los redactores.

Está convencida de que a su hijo se lo llevaron en una motocicleta, ya que fue lo último que se escuchó cuando el niño se dejó de ver.