En estos tiempos de agitado consumismo, pérdida de valores y tradiciones, la sociedad está muy necesitada de amor, de un auténtico amor materno y de apertura a una verdadera sensibilidad femenina.

Las madres son una fuente de amor que no se acaba. Con su cariño y cuidado, son junto a los padres, las responsables de formar buenos ciudadanos para la sociedad en el futuro y esta difícil tarea comienza desde antes de nacer el niño.

En los últimos tiempos, las nuevas mamás tienen novedosos y efectivos recursos que les pueden ayudar a estimular los sentidos del niño, inclusive desde el vientre materno a través de terapias con música y de la voz de sus padres.

Cada vez, las jóvenes madres son más conscientes de que en los primeros años de vida se definen todas las potencialidades que permitirán al niño desarrollarse, tanto en su vida personal como escolar, mientras que la música, ha sido identificada como una de las herramientas más valiosas en el programa de estimulación de los sentidos a temprana edad.

Lo cierto es que aunque algunas madres tienen una exitosa carrera, nada se compara con el sentimiento que les invade cada vez que ven a sus hijos reír o jugar en una obra escolar y sentir la satisfacción de que ellos van por buen camino.

Así que en el Día de las madres, no importa si trabaja, estudia o dedica su vida entera a sus hijos, por su entrega, sacrificio y devoción incondicional, son dignas de alabar y todas merecen respeto, amor y consideración.