MADRID (EFE).- El Gobierno regional de Galicia (noroeste de España) ha puesto en marcha un programa pionero de cooperación con la República Dominicana, por el que enviará 150 voluntarios a ese país para intentar que se incrementen las donaciones de sangre y evitar así su venta.

Según explicó ayer la consejera de Familia y Voluntariado del Ejecutivo regional gallego, Pilar Rojo, el objetivo es evitar que la donación de sangre «se realice con una transacción económica de por medio».

La primera fase del programa, que se desarrollará a partir del próximo día 19 en el Hospital Juan Canalejo de La Coruña, consistirá en un curso de formación, transfusión, promoción de donación y mercadotecnia en asuntos sociales, que tendrá una duración de 250 horas a lo largo de un mes y medio.

Tras este curso, los voluntarios se desplazarán a la República Dominicana durante tres meses, donde llevarán a cabo actividades de promoción gratuita de las donaciones de sangre y ofrecerán la formación necesaria a miembros de la Fundación Cristo de los Milagros, organización que se encargará de extender la presencia de nuevos voluntarios.

La República Dominicana tiene cerca de 8,2 millones de habitantes, de los que sólo 3.500 figuran como donantes voluntarios de sangre y no de forma permanente.

Estas cifras hacen que este país tenga uno de los peores índices en donación de Latinoamérica, según una nota de prensa del Gobierno regional gallego con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).