CARACAS. AFP. Cien días después de haberse puesto la banda presidencial, Nicolás Maduro ha afianzado su legitimidad, aún cuestionada por la dirigencia opositora, pero su liderazgo está siendo puesto a prueba por el grave deterioro económico que afecta cada vez más a los venezolanos.
«Maduro le ha ganado la batalla de la legitimidad a la oposición, ha alcanzado una legitimación interna y externa», explica el politólogo John Magdaleno. Maduro manifestó así su confianza en el futuro durante la conmemoración del 230º aniversario del nacimiento del libertador Simón Bolívar, el miércoles pasado: «No son 100 días. Son 100 años que va a estar la revolución, 100 años de revolución bolivariana, chavista y socialista (…) Vamos a seguir 100 días más y 100 días más y todo el tiempo que Dios nos dé de vida trabajando por la patria».