Maestros aspiran a elevar la calidad educativa y a lograr menor deserción

Maestros  aspiran a elevar la calidad educativa y a lograr menor deserción

Elevar las competencias de los alumnos, disminuir la deserción escolar, y que sea resuelta la situación con maestros que aún permanecen bloqueados en la nómina del Ministerio de Educación, son algunas de las expectativas de los docentes, en el marco del nuevo año escolar 2017-2018 que comenzó ayer.
En un recorrido por las escuelas del Gran Santo Domingo, maestros se mostraban optimistas, pese a las dificultades que enfrentó el sector en los últimos días.
Policarpio Sánchez, director la escuela Fidel Ferrer en el Ensanche La Fe, aspira a mejorar la calidad educativa. Para lograrlo, dice, introducirá algunos cambios en los procesos que dinamicen y contribuyan a mejorar los indicadores de logros de la escuela.
Su deseo es que padres se integren de manera más efectiva a trabajar a las actividades de la escuela.
Este año las escuelas se encuentran con una nueva modalidad, que los grados 7mo. y 8vo. ahora serán 1ro. y segundo de la secundaria, pero que por la falta de ubicación de esos grados, siguen en las escuelas básicas.
Aunque ha bajado bastante el nivel de deserción, la meta del Tirson Manuel Mota, director de la Escuela María Teresa Mirabal, en Sabana Perdida, es lograr que menos estudiantes deserten o abandonen la escuela.
Este centro es uno de los pioneros en Tanda Extendida. Este será su cuarto año y aspira a que sus estudiantes logren las competencias que el centro se ha trazado.
Quiere más. Alumnos que ingresen al politécnico Simón Orozco en Invivienda. Esa es la meta que tiene, ya no para este año, el diácono Vicente Vidal, quien en este año escolar asume la dirección en el centro que entrega bachilleres técnicos en las áreas de electrónica, electricidad, turismo, corte y confección y otros oficios.
El centro, con una matrícula de 750 alumnos, ayer recibió cerca del 70% de asistencia.
Bloqueados en las aulas. Uno que no está muy optimista con el inicio del año escolar es el maestro Juan Enrique Cardenal. Él fue uno de los miles de maestros bloqueados de la nómina de Educación, y aunque admite pudo cobrar el salario de julio, aún no aparece en la nómina, por lo que espera que el ministerio resuelva esa situación lo antes posible.
Otro que expresó su disgusto por la situación en la que todavía permanecen algunos maestros es Tomás Castillo. Cuestiona también que el ministro Andrés Navarro decida cómo usan los maestros sus recursos al restringir el porcentaje que podían tomar prestado.
Aunque el ministro de Educación llamó a los maestros que no aparecen en la nómina a no acudir a las aulas, la maestra Aracelis Matías cree que es en las aulas donde se debe dar la pelea. En su caso no aparece en el sistema y no ha habido forma de ser restituida, pese al apoyo de su escuela Mauricio Báez.
La educadora fue trasladada hace tres años a este centro desde Barahona, donde ya tenía cinco años en la enseñanza.
Ella tiene tres meses bloqueada, y pese a las precariedades económicas que la supresión de su salario a significado, entiende que sus niños no deben quedar solos.
Tanda extendida. Aunque algunos centros tienen varios años en la modalidad de Tanda Extendida, como el Patria Mella, que inicia su tercer año, los niños aún tienen que comer en las aulas y el almuerzo es servido en pasillos, porque no se les ha habilitado un comedor.

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