Cuando de organizar se trata, muchos elementos intervienen, pero -definitivamente- el primer paso es la limpieza de los espacios. Sin esto no hay orden que valga. Luego de este paso fundamental, no solo por estética sino también por salud, los demás mandamientos serían tener un poco de ingenio y creatividad.
Una buena manera es auxiliarse de mesas, repisas, gavetas, cajas… (estas pueden ser decorativas para que tengan una doble funcionalidad), botes o envases diversos para contenidos sólidos y líquidos, tablas en las paredes con palometas…
Si cuenta con un espacio pequeño, lo ideal es organizar verticalmente, pero sino, hágalo de forma horizontal, pero en su lugar.