Las amenazas de un fraude electoral fue lo que motivó que antes de que se emitiera el primer boletín con los resultados de las votaciones, monseñor Agripino Núñez Collado y observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) se presentaran a la sede de la Junta Central Electoral (JCE) para hablar al país desde allí.

Inmediatamente concluidas las votaciones, a las 6:00 de la tarde, personas vinculadas al gobierno comenzaron a moverse e inquietarse por los resultados de los comicios.

Personas consultadas en la JCE dijeron que luego de la emisión del boletín cero, a las 6:30 de la tarde, se formó un «tapón» en la transmisión hacia la JCE de las actas de las principales provincias del país y el sistema mostraba en la pantalla «se están validando» y el mapa aparecía morado casi en su totalidad.

Hasta los miembros de la JCE, quienes se encontraban en sesión permanente, comenzaron a llegar rumores en el sentido de que la tardanza en la transmisión de las actas obedecía a que desde grupos vinculados al gobierno se había bajado una línea para que sólo se escanearan las actas de los colegios con menor votación.

Al conocer ese rumor, el doctor Rafael Díaz Vásquez planteó a los demás miembros de la JCE que había la necesidad de formar una cadena con todos los medios de comunicación electrónicos, con el argumento de que Miguel Guerrero, de Cadena de Noticias (CDN) canal 37; Nuria Piera y José Armando Bermúdez, de Color Visión canal 9, se proponían hacer transmisiones con los resultados electorales.

Como la primera vez que lo planteó, esa propuesta fue rechazada por el presidente de la JCE Luis Arias, así como por los demás miembros Rafaelina Peralta, Roberto Rosario y Luis Nelson Pantaleón, mientras que Nelson Gómez permaneció neutral.

Rosario se comunicó con Sonia Piera, hermana de Nuria, quien negó la versión de Díaz Vásquez e igual hizo el señor Bermúdez en una llamada a los miembros de la JCE, por lo que el tema quedó cerrado.

A las 7:30 de la noche la JCE decidió comisionar a Peralta, Rosario y Díaz Vásquez para que fueran a la Junta Municipal Electoral del Distrito Nacional (JMEDN) a indagar qué pasaba con las actas que no fluían.

En principio Díaz Vásquez rehusó formar parte de la comisión, sin embargo, después los jueces optaron por enviar sólo al director de Elecciones, Gilberto Cruz Herasme.

En la JMEDN se encontró con que la delegada política del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), doctora Luz María Tevenín, tenía las actas de «500 colegios sin darle paso», a pesar de ser una «veterana» en procesarlas.

Nuevos rumores volvieron a llegar hasta la Junta, esta vez dando cuenta de que los colegios de las principales provincias estaban siendo cercados por personas armadas; que un oficial había «tomado» la de Bonao y Guido Gómez Mazara, junto a un grupo seguidores portando armas largas aterrizaron en Consuelo en dos helicópteros.

Ante la gravedad del caso y a instancias del juez Rosario, a las 8:00 de la noche se pidió al presidente de la JCE, Luis Arias, que llamara a monseñor Núñez Collado y al jefe de la misión de observadores de la OEA, Santiago Marray.

Temprano en la tarde Murray se había comunicado con el doctor Arias para ir a la JCE, pero se le había dicho que eso no sería posible sino hasta horas de la noche.

Quince minutos después, 8:15 de la noche, mientras se esperaba la presencia de Núñez Collado y Murray, y luego de comprobar que había diez colegios «tomados» por personas armadas y en actitud agresiva, los miembros de la JCE hablaron con el secretario de las Fuerzas Armadas, teniente general José Miguel Soto Jiménez, quien les dio garantías de que nada ocurriría.

A las 9:15 llegaron a la JCE monseñor Núñez Collado, Murray, los embajadores de los Estados Unidos, Hans Hertell; Miguel Amado, de la Unión Europea; Adam Blackwell, de Canadá; María de Jesús Figa López, de España; Eva Kendeffy, de Alemania, y el ex presidente de Colombia, Andrés Pastrana, quienes durante una reunión con los miembros de la JCE, confirmaron los rumores que hasta éstos habían llegado.

En esa reunión Núñez Collado planteó la necesidad de hablarle al país a través de una rueda de prensa, a lo que asintieron todos.

Sin embargo, ya a solas, entre los jueces de la JCE se generó una disputa debido a que los doctores Ramón Hernández Domínguez, Salvador Ramos, José Luis Tavarez y Díaz Vásquez entendían que los jueces no debían acompañar al grupo de observadores encabezados por Núñez Collado en la rueda de prensa.

Decididamente, el presidente de la JCE dijo que él sí participaría y que el doctor Nelson Gómez, presidente de la Cámara Administrativa, debía hacerlo también, y entonces el resto aceptó participar en la rueda de prensa, momento en que, al igual que el país, se enteraron de lo que Núñez Collado iba a decir.

Las palabras de monseñor Núñez Collado obedecieron a que tanto él como Murray tenían en sus portafolios los resultados del escrutinio reunidos por la OEA y la Penn & Schoen, que daban como ganador de los comicios a Fernández.

En ese momento, la proyección de la OEA en porcentajes de votos por candidato era de 58.25% para Fernández, 32.34% Mejía y 8.72% Eduardo Estrella.

[b]HABLA GÓMEZ[/b]

El presidente de la Cámara Administrativa, Nelson Gómez, reveló ayer que fue después que el presidente Hipólito Mejía reconoció el triunfo del doctor Leonel Fernández fue cuando el flujo de actas comenzó a ser más fluido.

Afirmó que el escaneo de las actas se vio afectado porque en muchos lugares las lluvias humedecieron el plástico; la lentitud conque hasta pasadas las 10:00 de la noche hubo en la recepción de las mismas obedeció a otras razones.

«El reconocimiento del presidente de la República de que había perdido las elecciones facilitó que los delegados soltaran el sistema y se pudiera validar con mayor rapidez», dijo Gómez.

Consideró como un gesto «muy noble» de parte del jefe del Estado, reconocer con los datos que tenía en su centro de cómputos la victoria obtenida por el candidato presidencial del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).

El presidente de la JCE calificó como «exitoso» el proceso electoral y en lo personal dijo sentirse «perfectamente bien» con los resultados, ya que nunca tuvo dudas de que las cosas iban a salir bien «porque nunca hemos planificado lo mal hecho», expresó.