Lima, Efe.- El músico español Manolo García recibió anoche en un concierto que ofreció en Lima el cariño de los fanáticos de “El último de la fila”, dúo que integró hace más de diez años.

El cantautor barcelonés abrió su presentación con “Insurrección”, una de las canciones más emblemáticas de su ex agrupación, lo que desató una conexión inmediata con el público.

Capturados por su voz, las melodías del violín y la guitarra acústica, los seguidores de Manolo García se dejaron llevar por un recorrido desde el pop de los ochenta de “El último de la fila» hasta sus recientes discos en solitario, tras la separación de su ex compañero Quimi Portet.

Así, fueron llegando “Nunca el tiempo es perdido”, “Sara”, “Para que no se duerman mis sentidos”, “Aviones plateados” y “Como un burro parado en la puerta del baile”, temas que provocaron la euforia de los nostálgicos congregados en el Hotel María Angola.

“Todo el mundo busca la dicha pero nadie sabe encontrarla”, dijo García, quien agregó que él la había hallado en el escenario.

El artista remarcó que tenía una deuda moral con los seguidores de “El último de la fila” en Lima y por eso decidió incluir a la capital peruana en su pequeña gira latinoamericana que inició en México esta semana.

Aunque no se animó a cantar canciones autóctonas  , sí se probó una gorra andina.