Las calles que rodean el Congreso Nacional se convirtieron ayer en un mar humano que se congregó para protestar contra la modificación de la Constitución, atendiendo a la convocatoria del precandidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Luis Abinader.
Todo parecía estar en calma entre las personas que con cartelones en mano, a ritmo de redoblantes y cornetas, lanzaban consignas contra el presidente Danilo Medina y los funcionarios de su gobierno, mientras que cientos de agentes policiales comandado por el general Máximo Báez Aybar, colocados ordenadamente detrás de las barricadas, permanecían estoicos pero alertas ante cualquier situación.
La agitación comenzó a apoderarse del ambiente en la medida que jeepetas, color negro en su mayoría y vidrios oscuros, llegaban con diputados en su interior. Algunos como Henry Merán y Orlando Espinoza, prácticamente obligados por la prensa, se detuvieron para opinar, mientras que otros diputados del sector danilista fueron abucheados por simpatizantes del PRM, que ya habían tomado toda la calle Paul Harris.
“Nosotros vamos a continuar esta lucha; esta gesta patriótica para que compañeros que en este momento ejercen el Poder Ejecutivo entiendan que lo que necesita el pueblo es que prevalezca la constitucionalidad y el Estado de Derecho en la República Dominicana y cualquier opinión nacional o internacional, bien intencionada que procure la permanencia democrática de las instituciones en la República Dominicana y el respeto a la constitución, lo vemos con mucho beneplácito, con mucha satisfacción y agradecemos esos aportes”, dijo Henry Merán, quien descartó que la llamada del Secretario de Estado de Estados Unidos, Michael Pompeo al presidente Medina, no debe ser considerada como injerencia.
“Mientras esté el congreso cercado yo pienso que no hay condiciones para que se desarrolle con normalidad una sesión en la Cámara de Diputados. Yo lo que espero es que en pocos minutos de iniciada la sesión se suspenda”, aseguró Espinoza, y tal como lo pronosticó sucedió.
La efervescencia en el ambiente siguió subiendo cuando apareció en el escenario el apóstol José Cristopher, presidente del Movimiento “Proyecto Visión Nación”, quien lanzando dinero a la multitud, como un símil de los sobornos a su juicio están recibiendo diputados y senadores, para que vendan su consciencia.
Los ánimos se elevaron más cuando un grupo de diputados del PRM cantando el Himno Nacional, sorpresivamente salió del Congreso y mezclándose en la multitud fueron a recibir a Luis Abinader, quien bajaba por la avenida Enrique Jiménez Moya, junto a miles de seguidores que vociferaban “e’pa’fuera que van”.
El discurso de Luis Abinader. “Gracias por acompañarme a esta jornada cívica en defensa de la democracia, de la paz social y la defensa de la seguridad jurídica”, fueron las primeras palabras de Luis Abinader, quien calificó la voz del pueblo como voz de Dios.
Llamó a los congresistas a no obedecer lo que calificó como una orden para atentar contra la constitución y el orden democrático.
Felicitó a los diputados del PRM por su firmeza y dijo, que el PLD ha hecho una tradición del continuismo y aseguró que lo que sucede en el Congreso es la expresión de una lucha por el poder. “No hay en esa lucha más nada que no sea una competencia de ambiciones continuistas”, dijo.
Abinader advirtió al PLD que no tiene temor de enfrentar a Danilo ni a Leonel. “A cualquier de los dos le vamos propinar una derrota histórica”, expresó.
Más del acto
Se lanzarán a las calles
Abinader advirtió que si por alguna de las cámaras que integran el Congreso llega el proyecto de reforma constitucional, se lanzarán a las calles con sus seguidores.
Llevaron una vaca. Llamó mucho la atención, que uno de los manifestantes se hizo acompañar en la protesta de una vaca, la cual tenía una pancarta.