En español: Kid Kapicúa o en inglés: Keep on Fighting, es el título de la exposición presentada desde el 30 de octubre hasta finales de noviembre del 2003 por Marcos Lora Read en la galería Joan Guaita Art, situada en Verí No.10 de Palma de Mallorca, España.
Sólo seis obras le bastaron a Lora Read para desplegar su demoledora metáfora de la persistencia a través de una serie de imágenes y objetos referidos a los ambiguos, contradictorios y controversiales deportes del boxeo, el desafío existencial y la imaginación creadora. Esta muestra estuvo conformada por una selección de las propuestas que el artista instalara el pasado año, bajo el mismo título, en la galería Carmen Rita Pérez/Arte Actual de Santo Domingo y en la Galería Metis de Amsterdam.
Tomando en cuenta la importancia de la cartera de artistas y el merecido prestigio que se le asigna a Joan Guaita en el ámbito artístico europeo, la cálida acogida de la propuesta del talentoso e imbatible artista dominicano en Palma de Mallorca constituye una nueva prueba del perfil trascendental que cobra su implicante práctica simbólica en el contexto de la realidad artística latinoamericana Contemporánea, así como de la misma reafirmación de su trayectoria ascendente en los más exigentes circuitos artísticos y culturales internacionales. En las propias palabras de Marcos Lora Read, Kid Kapicúa es una selección de trabajos (imágenes, artefactos e instalaciones) que esencialmente plantean las contradicciones y la ambigüedad entre el éxito y el fracaso.
Hace más o menos una década, Marcos Lora Read viajaba con un trailer a cuestas. Ahora lo hace en una cápsula ultramarina. Con este maravilloso artefacto fue, precisamente, que el artista dominicano impactó positivamente a los especialistas y espectadores de la 50 Bienal Internacional de Venecia (2003). En la actualidad, el fabuloso submarino o Cápsula Caribeña de Lora Read se está exhibiendo en la galería de la Cite Internationale Des Art de Paris, como parte de la exposición en que tiene participación junto a los artistas Jerome Estienne (Francia) y Koffi Yao (Costa de Marfil). La exposición fue inaugurada el pasado 21 de enero y ha resultado de la coincidencia oportuna de estos tres creadores de reacciones polivalentes en la Cite Des Art como participantes del Programa de Residencias Artísticas Internacionales de esta prestigiosa institución artística francesa.
Como inspirado e invicto duelista trasmarino, Marcos Lora Read jamás baja la guardia, ni siquiera ante el eternamente mítico y, en muchas ocasiones hasta inclemente, espejismo del Ring artístico y cultural parisino. Así, como tensando las cuerdas de su imaginación, nuestro imaginero no se rinde en su duelo por traspasar límites y concretizar acciones en pos de la intensificación del diálogo multicultural a través del arte contemporáneo. Sobre el significado y trascendencia de las recientes o inminentes acciones de Lora Read en distintas ciudades europeas se impone una próxima entrega. Mientras tanto, aquí se impone dejar constancia de la receptividad y el respeto obtenidos por su obra en Palma de Mallorca. Los Fragmentos siguientes son de Marcos Torío (1), crítico de arte del diario El Mundo/El Día de Baleares.
Una cuerda de entrenamiento en hierro niquelado, unos guantes de púgil creados con fibras revestidas de látex y con una apariencia de piel humana en los que Lora representa la «fragilidad» o un gran lienzo con un ave agorera de protagonista son algunas de las piezas y materiales que el artista ha usado como «proyección y desarrollo de una idea».
Acrílicos, poliéster, madera, hierro, bronce son elementos sobre los que el artista ha construido, desde el año pasado, «la ambigüedad y la relatividad del éxito, sobre todo, en el boxeo, donde todo puede cambiar en una pelea».
[b]MANTENERSE EN LA LUCHA[/b]
Estableciendo paralelismos con su labor de creador, en ambos, aclara, «existe la idea de cómo mantenerse en la lucha». Sin embargo, en su opinión, la vida del artista no consiste en «un gran combate, sino en una secuencia de batallas que compone su trayectoria».
Su referente e ícono es el boxeador Joe Louis Barrow (1934 1981), campeón mundial durante doce años. Él es uno de los protagonistas del lienzo Peatón cruzando el paso de cebra.
Lora es consciente del concepto que mucha gente tiene del boxeo como deporte violento. El no comparte esta opinión, aunque reconoce que «quizás sea agresivo, pero no más de lo que pueden ser las sociedades actuales».
A favor del boxeo argumenta también el hecho de que existan «una serie de reglas» y que se entienda como «un pacto de caballeros en el que se respetan ciertas cosas que no se pueden hacer».
En su particular metáfora entre arte y boxeo, habla de la figura del creador refiriéndose a «alguien que tiene que librar combates en todas partes». Con esta frase alude a las políticas culturales existentes en Santo Domingo, donde «los artistas son sus propios gestores y la situación es de autosuficiencia lo que dificulta su continuidad». De momento, Marcos Lora ha sabido buscar su camino y pelear por él. Su trayectoria incluye participaciones en varias bienales como la de Sao Paulo, la de Johannesburgo o la de La Habana.