La vicepresidente de la República y candidata a esa misma posición, Margarita Cedeño de Fernández, detalló la respuesta dada a una serie de personas que comunicaron por diferentes medios que necesitaban ser incluidas en el programa Quédate en Casa.

De las 243 mujeres que trabajan en salones (saloneras) y que reclamaron ser incluidos en el programa Quédate en Casa, le encargada del Gabinete de Coordinación de Políticas Sociales del Gobierno identificó que cinco de ellas estaban en el Fondo de Asistencia Solidaria a Empleados (FASE), siete en Quédate en Casa, 24 eran miembros de hogares beneficiados, 62 estaban activas en la Tesorería de la Seguridad Social (TSS), es decir que recibían un salario. Las demás serán incluidas y recibirán la próxima transferencia, prometió Cedeño de Fernández.

Cedeño se refirió a un grupo de siete personas que reclamaban recibir la asistencia gubernamental, pero que luego fue constatado que cinco de ellas recibían ya el beneficio. Explicó que tres ya estaban en el programa Progresando con Solidaridad, una recibía el subsidio de Quédate en Casa vía su número de cédula, y la otra ya estaba en un hogar incluido en el programa. De esa manera, sólo dos no reciben ningún tipo de ayuda, por lo que serán inscritos para recibirla.

La candidata también respondió a una comunidad en Dionisio Abajo, en Monte Plata, donde cinco personas reclamaban ser incluidos. «Al hacer contacto verificamos que cuatro de ellos ya eran miembros de un hogar que recibe el beneficio, y la otra está beneficiada por el programa FASE» agregó.

En los Pepines de Punta, en Villa Mella, 86 personas necesitaban ayuda estatal, pero al verificar las cédulas, 18 estaban registrados en la TSS, nueve en FASE, ocho estaban ya en hogares beneficiados y siete recibían el subsidio directamente, detalló Cedeño. El resto será integrado al programa para recibir la próxima transferencia y comprar alimentos.

La también exprimera dama mencionó a una señora en La Zurza que pedía ayuda pero, según ella, tiene un salario de RD$26,250 registrado en la TSS.

La vicepresidente defendió la objetividad y rigurosidad con que, a su juicio, se seleccionan a los beneficiarios de los programas sociales del gobierno.