“Pienso que nuestro mayor logro fue conectar y ser aceptada en esos primeros momentos tan difíciles para la difusión de la música”, es la respuesta de María Díaz a la pregunta de cuál considera ha sido el mayor logro de su trayectoria de 40 años en la música típica.

Pues al igual que el merengue tradicional y la bachata, este sabroso género que representa con orgullo “La reina del merengue típico”, pasó por un proceso en donde las mujeres no la tenían fácil.

“Cuando conectamos se nos abrieron muchas puertas, obtuvimos galardones, pudimos monetizar el trabajo y obtuvimos muy buenos resultados”, destaca Díaz.

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La acordeonista también resalta que la fórmula para mantenerse todos estos años como una de las líderes del género ha sido “nuestra fe en Dios, la consistencia en hacer las cosas bien, la perseverancia, mantener un buen equipo de trabajo y el aprender a construir caminos con los mismos ladrillos que nos lanzaron”.

Sus éxitos y experiencia le dan la licencia a María de opinar en uno de los temas que más se debaten con relación a nuestros géneros autóctonos. Sobre esto resalta: “Pues ¨miro el relevo y me asombro con tanto talento, me gusta ver y saber que estamos dejando en buenas manos lo que con tanto sacrificio hemos ido construyendo. Felicito a todas las jóvenes nuevas exponentes por lo bien que lo están haciendo, por la seriedad en su trabajo y por la dignidad con la que se mantienen en el genero”.

Aunque la merenguera ha tenido grandes logros, ella dice que aún le faltan metas por cumplir y una de ellas es realizar un gran espectáculo “conmemorativo a mi larga carrera y que a su vez sirva como valor agregado para el enriquecimiento del género, y ya estamos planeando e ideando eso con la ayuda de Dios y nuestro equipo de trabajo”.