Los Ángeles. California será a partir del 1 de enero el estado más grande de Estados Unidos en legalizar la venta de marihuana con fines recreativos.
A continuación, una lista de claves sobre cómo operará el mercado y cómo el gobierno estatal regulará una nueva rama de la economía californiana, valuada en 7.000 millones de dólares.
Lo Básico:
California votó por la legalización en 2016. El objetivo es mejorar la regulación de la venta de marihuana medicinal, que lleva mucho tiempo, y también animar a los operadores del vasto mercado negro a ingresar al sistema legal.
En general, California tratará el cannabis como el alcohol, permitiendo que las personas mayores de 21 años posean hasta una onza de marihuana y cultiven hasta seis plantas en casa.
En diciembre el estado comenzó a otorgar licencias a las empresas de la nueva economía, incluidos los minoristas que la venderán y los distribuidores que la trasladarán de los cultivos a las tiendas.
¿Dónde y cuándo se podrá comprar Marihuana legal?
Depende de la localidad. En algunos sitios estará disponible el 1 de enero, pero en otros, como en Los Ángeles, hasta el 3.
El condado de Kern está entre los lugares que han prohibido toda actividad comercial de cannabis. Otras ciudades han pospuesto tomar medidas, esperando ver cómo se desarrolla el nuevo mercado.
Santa Cruz, San Diego, Shasta Lake, San José y West Hollywood ya han autorizado negocios para venta de marihuana recreativa.
Cuidado dónde la fumes.
La hierba legal viene con muchas restricciones. Primero, no se permite fumar en público y la ley estatal tiene reglas específicas que prohíben su consumo a menos de 300 metros de una escuela o una guardería cuando haya niños cerca, o mientras maneja.
Otra regla general
No fume en ningún lugar donde el tabaco esté prohibido. Los gobiernos locales son libres de establecer normas para fumar en las tiendas de venta, lo que algunos llaman cafeterías o salones de cannabis, pero eso variará de una ciudad a otra.
Los impuestos.
El estado impondrá un impuesto especial del 15% sobre las compras al menudeo de todos los productos de cannabis, incluido el medicinal.
Los gobiernos locales pueden aplicar gravámenes adicionales. En Los Ángeles, por ejemplo, los nuevos impuestos y tarifas podrían elevar el costo minorista de una pequeña bolsa de marihuana hasta en un 70%.
Los operadores temen que los altos impuestos lleven a los consumidores al mercado negro. El estado espera recaudar 684 millones de dólares en impuestos por marihuana el próximo año y ese número aumentará a 1.000 millones en varios años.