El senador oficialista por la provincia de Monte Plata, Charles Mariotti, dijo ayer que el salir a recolectar firmas extra padrón es una forma de darle la razón a quienes abogan por ‘primarias abiertas’, dentro del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
En franca alusión al expresidente Leonel Fernández y sus seguidores, Mariotti dijo que la acción de buscar un millón o 750 mil firmas fuera del padrón, en cierta manera, constituyen unas primarias abiertas.
“Sin ánimo de beligerancia quisiera que me dijeran algunos compañeros de mi partido cuando usted sale a buscar dos millones de firmas extra padrón, 750 mil firmas, un millón ¿usted sale a buscar las firmas únicamente de su partido o sale a buscar la anuencia de gente extra partido”?, preguntó tras recordar el versículo de la Biblia que habla de mirar la paja en el ojo propio, antes de mirar la del ojo ajeno.
Asimismo, criticó a los compañeros de su partido que señalaron como violadores de la Constitución a los 24 senadores que aprobaron la Ley de Partidos Políticos, con el régimen de primarias abiertas para las elecciones internas.
Dijo que, en ese caso, quien violó la Constitución fue el Comité Político (CP) del PLD que, en una reunión donde estaba Fernández, decidió dejar en libertad a los legisladores de votar según sus convicciones.
“Esos colegas que le carguen ese dado al CP que nos dejó en libertad de tomar la decisión que nos pareciese”, indicó Mariotti.
“PLD ya no sanciona”. Sobre si habría sanción para los senadores que abandonaron la sesión del pasado miércoles, Mariotti dijo que ya el PLD no sanciona a nadie. “(Fue) una posición lamentable que en el futuro quizás tendrá sus consecuencias, pero que no me toca a mi adentrarme en esa parte porque hay una autoridad partidaria, pero el centralismo democrático en el PLD lo impuso Juan Bosch, no lo impuse yo, ni lo inventé yo”, indicó.
Sobre lo dicho por el líder Partido Revolucionario Moderno (PRM), Luis Abinader, que calificó como “una insensatez” el imponer primarias abiertas, dijo que lo insensato es hacer una crítica alegre sin irse a los fundamentos legales y no abrir espacio de discusión para ver qué le conviene al sistema de partidos.