Nueva York. La coordinación que existe en el montaje de los desfiles y la selecta asistencia de los invitados al New York Fashion Week fue ponderada por la diseñadora dominicana Marisol Henríquez, quien presentó su colección la semana pasada.
Durante mi carrera nunca había visto un backstage tan bien coordinado con respecto al trabajo de las modelos… el peinado, lo que permitió que la producción fuera perfecta, manifestó en entrevista dada a ¡Vivir!
Cada modelo -apuntó la diseñadora- tiene su estilo, el cual emplea en cada pieza que exhibe. Esto permite que el evento resulte más fabuloso, más fashionista.
Los desfiles son abiertos al público, pero sus organizadores dan preferencia a los más fashionistas, a los artistas plásticos, actores de teatro, periodistas de revistas, periódicos o televisión especializados en moda, pudo comprobar esta periodista.
Esta manera de organizar el trabajo es un incentivo para que Marisol empiece a preparar su próxima colección primavera verano. Ella no se arrepiente del trabajo tesonero en que se involucró -dijo- porque al fin logró su meta.
No es tan fácil llegar a New York Fashion Week, donde hay tanta competencia, lo que me llevó a preparar una colección que se viera nítida, con calidad y con buena terminación, como lo pude presenciar luego en pasarela, dijo.
El sello Marysun Internacional con el cual lleva calzada cada prenda de vestir y complementos como las carteras y bolsos fascinó al público; la noche del desfile hizo una considerable venta.
Marisol recibió elogios, no sólo de la opinión internacional, sino también de sus compatriotas Mirka Morales, Fidel López, Sócrates McKinney, ejecutivos de DominicanaModa, los estilistas Sandro Guzmán y Paolo Divaldi, invitados exclusivos a su colección, además de los esposos Jorge y Bernarda Williams y otros dominicanos residentes en esta importante urbe norteamericana.