Mark McGwire también tuvo momentos malos

Mark McGwire también tuvo momentos malos

Mark McGwire debutó en Grandes Ligas en la temporada de 1987 y asombró a todos pegando 49 jonrones para ser «Novato del Año» de la Liga Americana.

En los siguientes cinco años disparó casi 200 cuadrangulares convirtiéndose en una de las fuerzas más dominantes de todo el béisbol.

Se pensaba en grande sobre su futuro, ya que siempre McGwire despachó palos kilométricos, algo que lo distinguía entre los demás sluggers.

Sin embargo, llegaron los días malos. Cinco veces fue colocado en la lista de lesionados.

Sus totales de jonrones bajaron a 9 en 1993 y 9 en 1994. Lea bien. Nueve cuadrangulares por campaña. Pero después tuvo cifras de 34 y 24.

Aquí vuelve lo bueno. 11 años después llega a la Liga Nacional y su carrera resurge con los Cardenales.

En la campaña de 1998 libró la extraordinaria batalla de jonrones de Sammy Sosa, y no sólo la ganó, sino que terminó con 70 jonrones.

Al año siguiente volvió al ataque y disparó 65 para ganar su segundo liderado y nueva vez McGwire recuperaba su prestigio de gran jonronero.

Su carrera terminó por extrañas lesiones que se relacionan a los esteroides o sustancias, que eventualmente le hicieron más daño que bien. (McGwire pudo levantarse!.

Ken Griffey Jr cayó y ahora se levanta

Hank Aaron señaló a Ken Griffy Guiar como el principal candidato a romper el récord de jonrones de todos los tiempos en poder del ídolo de Atlanta.

Nadie lo puso en dudas. Griffey Guiar venía en ascenso y era el hombre a seguir. En los años grandes de Sosa y McGwire, él pegó dos veces 56 jonrones.

Llegaron los día malos. En el 2001 dio 22 jonrones, en el 2002 disparó ocho y en el 2003, sólo 13.

)Qué se decía?. El hombre se apagó y analistas ponían en dudas que llegara a Cooperstown.

Pero en los primeros dos meses de la temporada del 2004, Griffey Guiar ha retomado su ritmo de jonrones y recobra su prestigio.

Casi tiene 500 jonrones y se habla que podrá disparar más de 600 en su carrera para poder terminar bien su extraordinaria carrera.

Es una coincidencia que no falla

He citado algunos casos y les aseguro que hay muchos más. Las estrellas tienen sus momentos de baja porque es imposible ser tan consistente.

Yo recuerdo que cuando Cal Ripken estaba en su año de retiro, todo le estaba saliendo bien. Pegó jonrón y fue héroe del Juego de Estrellas.

Estaba bateando tan bien que la gente no quería que se retirara. Cierro este tema diciendo que no hay forma de que Pedro Martínez esté acabado.

Me mantengo en el grupo de gente que todavía confía en su calidad.

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