Lima. Más de 500.000 peruanos se han visto afectados por las intensas lluvias ocasionadas por el fenómeno climático de El Niño, que en lo que va del año ha causado 48 muertes y paralizado 5% de las vías nacionales.
El primer ministro Fernando Zavala informó el lunes desde el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional que también se han registrado 144 heridos, en especial en la región de Piura, ubicada en el norte costero del Pacífico cercano a Ecuador, donde las precipitaciones han provocado pérdidas por 121 millones de dólares, en especial en infraestructura y tierras agrícolas.
Agregó que las lluvias continuarían dos semanas en el norte y la Amazonía y que 10 ríos se encuentran en alerta roja por posibles desbordes. Las lluvias han provocado la afectación de 12.000 viviendas en más de 700 distritos de todo el país.
Abraham Levy, de la agencia privada de meteorología e hidrología Ambiand, dijo al diario Perú21 que en la región de Piura «está lloviendo 10 veces más de lo que llueve en un año normal, ello explica la magnitud del desastre». Las precipitaciones provocaron el desborde de un río que llegó hasta el centro de Piura inundando centros comerciales, comercios y casas además de provocar el colapso del servicio de desagüe de la región de 1,8 millón de habitantes.
El presidente Pedro Pablo Kuczynski recorrió el domingo varias calles inundadas de Piura y dijo que enviará equipos sanitarios para aspirar el agua, fumigar las casas y «deshacernos de las larvas y zancudos del dengue».
El comité multisectorial encargado del estudio nacional de El Niño dijo a inicios de marzo que las lluvias en la costa norte del Pacífico se producen por efecto de las altas temperaturas marinas y condiciones atmosféricas favorables.
Las precipitaciones ponen en peligro los sectores agrícolas, turísticos y pesqueros. Perú es el primer exportador mundial de harina de pescado.
De acuerdo con los reportes históricos entre 1982-1983 y 1997-1998 se produjeron los efectos más devastadores de El Niño en el país. Según datos oficiales, entre 1997 y 1998 el fenómeno climático provocó 374 muertos, 412 heridos, se destruyeron 59 puentes, 884 kilómetros de carreteras, 42.000 viviendas y 73.000 hectáreas de cultivos. Las exportaciones del sector pesquero disminuyeron 76,5% y las pérdidas nacionales fueron de 1.200 millones de dólares.