Soldados y voluntarios ayudan en las labores de emergencia en el sitio donde se estrelló un avión de pasajeros en Karachi, Pakistán, el viernes 22 de mayo de 2020. (AP Foto/Fareed Khan)
Un avión de pasajeros con 98 personas a bordo se estrelló el viernes en un vecindario abarrotado en el borde del aeropuerto internacional de la ciudad portuaria paquistaní de Karachi, después de una aparente falla de una turbina antes del aterrizaje.
Las autoridades dijeron que había al menos dos sobrevivientes del avión, pero no se sabía cuántas personas en tierra murieron o resultaron heridas. Al menos cinco casas quedaron destruidas.
En la comunicación por radio con la torre de control aéreo se escuchó al piloto del vuelo 8303 de Pakistan International Airlines haciendo un llamado de emergencia poco antes del accidente del Airbus A320, que volaba de Lahore a Karachi.
Un video difundido en redes sociales parecía mostrar el avión volando bajo sobre un área de viviendas, con llamas saliendo de una de sus turbinas.
Policías con mascarillas protectoras tenían fuertes problemas para despejar a las multitudes y permitir que las ambulancias pasaran por las calles estrechas hacia el lugar del accidente. La policía y los soldados acordonaron el área, donde había mucho polvo y humo.
Pakistán reanudó los vuelos internos a principios de esta semana antes del feriado de Eid-al Fitr, que marca el final del mes de ayuno islámico del Ramadán. Pakistán ha estado en confinamiento nacional desde mediados de marzo debido al coronavirus.
El alcalde de Karachi, Wasim Akhtar, dijo inicialmente que todos a bordo murieron, pero dos funcionarios de aviación civil dijeron que al menos hubo dos sobrevivientes. Hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados a hablar con los medios de información.
Las televisoras locales informaron que tres personas sentadas en la primera fila del avión sobrevivieron. Los canales transmitieron imágenes de un hombre en una camilla al que identificaron como Zafar Masood, director del Banco de Punjab. Informaron que se recuperaron al menos 11 cadáveres del lugar del accidente y que seis personas resultaron heridas. No quedó claro de inmediato si las víctimas fatales eran pasajeros.
La autoridad de aviación civil de Pakistán dijo que el avión de la aerolínea estatal Pakistan International Airlines (PIA) transportaba a 91 pasajeros y siete tripulantes. Horas antes, el aeropuerto de la ciudad nororiental de Lahore había dicho que había 107 personas a bordo. El portavoz de la autoridad de aviación civil, Abdul Sattar Kokhar, dijo que la discrepancia se debió a la confusión en medio de las secuelas caóticas del accidente.
Una transmisión del intercambio final del piloto con la torre de control de tráfico aéreo, publicado en el sitio web LiveATC.net, indicó que no había logrado aterrizar y que estaba dando vueltas para hacer otro intento.
Varios testigos dijeron que el Airbus A320 parecía haber intentado aterrizar dos o tres veces antes de estrellarse en la zona de viviendas, que es pobre y muy congestionada.
Un residente de la zona, Abdul Rahman, dijo que vio el avión dar vueltas al menos tres veces, aparentemente tratando de aterrizar antes de estrellarse contra varias casas.
El primer ministro de Pakistán, Imran Khan, tuiteó: “Sorprendido y entristecido por el accidente de PIA… Habrá una investigación inmediata. Oraciones y condolencias para las familias de los fallecidos”.
Airbus no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre el desplome. El vuelo a Karachi desde la ciudad de Lahore, en el noreste del país, suele durar una hora y media.
Los documentos de aeronavegabilidad mostraron que la última vez que el avión fue inspeccionado por las autoridades fue el 1 de noviembre de 2019. El ingeniero jefe de PIA firmó un certificado el 28 de abril diciendo que el avión había recibido todo el mantenimiento y que “está en condiciones de aeronavegabilidad y cumple con todos los estándares de seguridad”.
Los registros de propiedad del Airbus A320 mostraron que China Eastern Airlines voló el avión desde 2004 hasta 2014. El avión luego ingresó a la flota de PIA, arrendada a GE Capital Aviation Services.