Los Ángeles (EE.UU.).- Un avión con 201 estadounidenses evacuados de la ciudad de Wuhan (China), epicentro del brote de coronavirus, aterrizó este miércoles en una base militar de Riverside, en California (EEUU). La nave fletada por el Departamento de Estado originalmente estaba programada para aterrizar en el Aeropuerto Internacional de Ontario, a unos 64 kilómetros de Los Ángeles.

Sin embargo, la tarde del martes los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades anunciaron el nuevo lugar de aterrizaje, más alejado de zonas residenciales. En su trayecto a California, el avión hizo una escala en Anchorage, en Alaska, para reabastecer gasolina, y dónde los pasajeros fueron sometidos a revisiones médicas para poder continuar su viaje hacia California.

Los pasajeros, entre los que se encuentran personal del cuerpo diplomático, y una decena de menores, están siendo sometidos a una nueva revisión en las instalaciones militares de la base March Air Reserve Base, ubicada a unos 110 kilómetros del centro de Los Ángeles.

Los CDC indicaron en un comunicado que los pasajeros fueron revisados y evaluados por personal médico en “cada paso del camino, incluso antes del despegue” y a su llegada con el objetivo de “garantizar la salud de cada viajero”, incluyendo controles de temperatura y observación de síntomas respiratorios. En el área de California ya se reportaron dos casos del brote, mientras en Estados Unidos hay en total cinco casos confirmados por los CDC.

Las imágenes aéreas de los medios locales mostraron el avión estacionado en la mitad de la pista con la escalera extendida sin que los pasajeros descendieran inmediatamente. Las autoridades sanitarias indicaron que si alguno de los pasajeros presenta síntomas será trasladado a un hospital para una “evaluación adicional” y los que no se les pedirá que permanezcan en la base hasta realizar una evaluación más exhaustiva. Los CDC indicaron que están tomando todas las medidas necesarias, aunque reiteraron que el riesgo de exposición al coronavirus al público en general es “bajo».

Esta mañana medios nacionales informaron de que la Casa Blanca estudia la posibilidad de imponer una prohibición temporal de los vuelos hacia y desde China debido a la enfermedad, que ha causado ya casi 6.000 contagios confirmados y 132 muertes. El brote de coronavirus en China ha ido empeorando y extendiéndose, ya que además de en EE.UU., se han dado casos aislados en al menos otros 13 países, aunque sin registrase ninguna muerte.

Algunas aerolíneas habían suspendido ya gran cantidad de vuelos entre Estados Unidos y China, citando en parte una disminución significativa de la demanda, pero United Airlines y American Airlines han decidido congelar totalmente a partir de febrero algunas de sus rutas con China debido a la propagación del coronavirus. De acuerdo a medios, American Airlines cancelará de momento sus vuelos de Los Ángeles a Shanghái y Pekín del 9 de febrero al 27 de marzo.