NUEVA YORK. AFP. Más de un millón de litros de combustible diesel se derramaron en la ciudad de Nueva York tras el paso del devastador huracán Sandy y todavía continuaban los esfuerzos por limpiar las aguas, informó este jueves la cadena de televisión CNN.
La fuga de unos 1.136 millones de litros se produjo por una ruptura en un depósito de una refinería de Nueva Jersey cercana a Nueva York, perteneciente a la sociedad Motiva, controlada por el gigante del petróleo Shell.
Los guardacostas estadounidenses organizaron operaciones de limpieza con un centenar de personas que instalaron presas flotantes alrededor de la fuga, precisó la CNN. Ni los servicios de guardacostas ni Shell se encontraban disponibles para comentar estas informaciones.