Más dudas que certezas. Desde el pasado lunes, y como parte del Plan Integral de Gestión de Tráfico “RD se Mueve”, el Gabinete del Transporte inició el operativo “No Estacione”, que en esta primera etapa tiene como único objetivo orientar a la ciudadanía sobre las nuevas disposiciones de señalización vial, para lo cual desplegó a mas de 600 agentes de la Digesett en las principales vías del Polígono Central. El general Pascual Cruz Méndez, director de la Digesett, explicó que en esta primera semana los miembros de esa institución se enfocarán en orientar a los conductores sobre la señalización de “No Estacione”, que de ahora en adelante tendrán que ver y respetar porque habrá decenas de grúas, situadas en lugares estratégicos, para remolcarlos.

Pero es probable que una semana de educación y orientación no resulten suficientes, pues conociéndonos como nos conocemos puede apostarse mucho a poco que cuando el nuevo plan arranque el principal problema será el alegato de los automovilistas de que ignoraban las nuevas disposiciones. También preocupa que en una ciudad atestada de vehículos, donde no hay suficientes parparqueos para todos, se tomen medidas de esa naturaleza sin ofrecerle alternativas a la gente, que a falta de un transporte colectivo eficiente y seguro tiene que usar su propio vehículo para ir a todas partes.

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Y en el Polígono Central la escasez de parqueos es particularmente dramática, lo que muchos asumen como una licencia para parquearse “donde se pueda”, incluidas las aceras. Por eso me atrevo a preguntar:

¿Habrá suficientes grúas para remolcar a la gran cantidad de infractores que producirán esas disposiciones? Cuando “RD se Mueve” empiece a moverse, desde el próximo primero de julio, tendremos esas respuestas y algunas mas. Mientras tanto son pocas las certezas y muchas las dudas, que en el caso de la prohibición de doblar a la izquierda en las principales avenidas de la Capital evolucionan hacia el convencimiento de que será un tollo gigantesco. Ojalá esté equivocado.