SAN SEBASTIAN, España (AP).- Dirigentes de los principales partidos políticos de España encabezaron el sábado una manifestación de decenas de miles de personas a través de esta elegante ciudad vasca a fin de protestar contra un plan del gobierno regional para conseguir una mayor independencia de España.

Detrás de una pancarta que decía, «Esto es chantaje, no un plan», los manifestantes desfilaron durante unas dos horas a través del centro de San Sebastián.

La protesta fue convocada a raíz del «Plan Ibarretxe» llamado así porque fue presentado por el presidente de la región vasca Juan José Ibarretxe, que propone realizar negociaciones con el gobierno central de Madrid en el 2004, a fin de redefinir la relación de la región con el estado español, junto con propuestas de soberanía compartida y asociación libre.

El plan plantea también un plebiscito sobre el resultado de las negociaciones, que muchas personas consideran un referéndum sobre la autodeterminación.

El plan, respaldado por los partidos nacionalistas que gobiernan en la región vasca, ha enfurecido al presidente del gobierno José María Aznar y a los principales partidos del país, todos los cuales se oponen a un cambio constitucional para alterar la composición del país.

El gobierno ha entablado una demanda ante el Tribunal Constitucional y proyecta reformar el código penal para proscribir el referéndum.

Los casi dos millones de habitantes de la región vasca están divididos en torno al tema de la independencia de España. La región es una de las 17 autonómicas del país.

Los críticos dicen que el plan de Ibarretxe tiene como propósito apaciguar al grupo armado vasco ETA, que ha matado a más de 800 personas desde que inició en 1968 su campaña por la independencia.

La ETA ha criticado el plan en comunicados, pero ha dicho también que el proyecto indicaría que la región vasca avanza hacia la independencia.

La protesta del sábado atrajo a millares de personas de toda España, muchas de las cuales fueron llevadas a San Sebastián en autobuses contratados por el Partido Popular de Aznar y por el opositor Partido Socialista.

El líder del Partido Popular Mariano Rajoy, el dirigente socialista José Luis Rodríguez Zapatero y varios ministros del gobierno se unieron a la marcha.