Hoy es Día Internacional de la no violencia contra la Mujer, pero la joven Geraldine Ivette Sánchez Baldera no podrá verlo, pues ayer pasó a ser la víctima 171 de feminicidios en lo que va de año en el país. La habría matado su exesposo, Martín Batista Ogando, quien se entregó anoche.
Testigos dijeron que la joven de 28 años fue asesinada de un disparo en la cabeza frente a su trabajo por un hombre dentro de una yipeta Runner blanca de vidrios tintados, que tiró su cadáver y huyó sin ser identificado y que la habría llamado por teléfono para juntarse y que hablaron por unos minutos.
La Policía informó anoche en rueda de prensa que recuperó el arma usada y el vehículo que el homicida dejó abandonado en el parqueo de una tienda, en la avenida 27 de Febrero.
Geraldine era asistente de ventas en la empresa de tecnología Sitcorp, donde trabajaba desde hacía cinco años. El hecho ocurrió a las 11:00 de la mañana en el sector Galá, entre la avenida Núñez de Cáceres y calle Primavera, del Distrito Nacional.
Recibió llamada. “Ella recibió una llamada y salió y se juntó con una persona y le dieron el tiro”, explicó su compañero Randolph Martínez. Dijo que la persona iba una yipeta Toyota 4 Run.
Martínez definió a Geraldine como una persona muy alegre, servicial y buena compañera.
Dejó en la orfandad a un niño de dos años.
Coerción. Compañeros de Sánchez dijeron que Batista tenía una orden de alejamiento por haberla golpeado en noviembre del año pasado, cuando acudió a su trabajo y la obligó a abordar su vehículo. Producto del hecho, resultó con fracturas.
Batista fue denunciado y recibió una garantía económica de RD$100 mil, impedimento de salida y presentación periódica.