BAGDAD (AFP).- Veintiséis iraquíes murieron en actos de violencia ayer, día del tercer aniversario del inicio de la guerra en Irak, indicaron fuentes de seguridad que también anunciaron el descubrimiento de nueve cadáveres no identificados y ejecutados a balazos.
Una explosión en un café de Bagdad, propiedad de un chiíta y situado en el barrio sunita de Adhamiyá, se saldó con tres muertos y 22 heridos en la tarde del lunes, según fuentes del ministerio del Interior.
La deflagración se debió a una carga colocada en el interior del establecimiento, dijeron las mismas fuentes.
En Bagdad al-Jadida, un barrio al este de la capital, una explosión cerca de un vehículo estacionado frente a un popular restaurante mató a cuatro civiles e hirió a otros diez, según la policía.
En Baiji, a 200 km al norte de Bagdad, tres ingenieros que trabajaban en una central eléctrica fueron abatidos por desconocidos que se encontraban en el interior de un vehículo, informó la policía.
El ataque más violento se produjo en la capital iraquí donde una bomba explotó al paso de un vehículo de comandos de la policía, dejando seis muertos, tres de ellos miembros de las fuerzas del orden, según una fuente de seguridad, que indicó que otro policía quedó herido.
En el norte de la capital, otra bomba mató a tres personas que iban en un auto, informó la policía de Kirkuk, que no pudo identificar los cuerpos. Cuatro miembros de un grupo encargado de proteger las infraestructuras murieron por la explosión de una bomba en la localidad de Jurf al Sajr, a 60 km al sur de Bagdad.