KANDAHAR, Afganistán, (AFP) .- Un total de 41 talibanes y seis policías resultaron muertos el viernes en el suroeste de la ciudad afgana de Kandahar (sur) en un antiguo feudo del jefe del derrocado régimen talibán, el mulá Omar, en uno de los enfrentamientos más sangrientos de los últimos meses.

“Cuarenta y un talibanes murieron y un gran número resultó herido”, mientras “seis policías fallecieron y nueve sufrieron heridas”, declaró el sábado a la AFP el gobernador de la provincia de Kandahar, Assadula Jalid.

Sin embargo, los talibanes reconocieron solamente la muerte de dos de sus miembros y afirmaron que el resto de las víctimas son civiles en los enfrentamientos que continuaban el sábado entre rebeldes y las fuerzas afganas, apoyadas por la coalición internacional.

El jefe de la policía del distrito falleció y el responsable del distrito resultó herido, indicó el gobernador. El balance es uno de los más sangrientos de los enfrentamientos de los últimos meses entre los talibanes y a las fuerzas de la coalición internacional liderada por Estados Unidos y afganas. Tres civiles resultaron heridos, según el gobernador, quien explicó que tras el inicio de los enfrentamientos en los alrededores de Singesar, a unos 40 km al suroeste de Kandahar, los habitantes de la localidad huyeron.

Trece talibanes fueron arrestados durante la operación en esta localidad, donde vivió durante varios años el jefe de los rebeldes talibanes, el mulá Omar.

Omar emprendió la fuga tras la caída del régimen en 2001, provocada por la intervención militar de una coalición internacional liderada por Estados Unidos.

Yusuf Ahmadi, portavoz de los talibanes, reivindicó la muerte del jefe de la policía y de otros 12 agentes, a la vez que admitió tan sólo la muerte de dos de sus miembros y tres heridos.

La batalla enfrentó a decenas de talibanes y varios centenares de miembros de las fuerzas de seguridad afganas, apoyados por helicópteros de la coalición que lanzaron varios cohetes.

“Cuando las fuerzas de la coalición comenzaron a bombardear la zona, los civiles ya habían abandonado” la localidad, informó el gobernador Jalid.

“Ibamos a hacer un ‘pic-nic’ cuando se inició la batalla”, indicó a la AFP Zahir Shah, quien añadió que entre 200 y 250 talibanes participaron en los combates.

Otra operación, llevada a cabo por 2.500 estadounidenses y afganos en la provincia oriental de Kunar, no ha ofrecido hasta ahora resultados concretos.

Un comunicado de la coalición indicó que no se habían producido contactos importantes con los rebeldes, mientras que las autoridades afganas informaron de la muerte de dos talibanes el viernes.

Por otro lado, en la operación “León de Montaña”, emprendida el miércoles con un importante apoyo aéreo, participaron sobre todo bombarderos B-52, así como aparatos A-10 Thunderbolt, especializados en el apoyo a las tropas terrestres.