POR DIEGO PESQUEIRA
Un dirigente deportivo y estudiante universitario murió baleado la madrugada de ayer en un incidente originado en la discoteca La Quora, ubicada en la calle La Guardia, Villa Consuelo, donde además resultaron heridos los baloncelistas de la selección nacional Hansel Salvador “Kikima” y Okaris Lenderborg.

La víctima es el joven Elvis Luis Fanfan, de 27 años, quien residía en la calle Caracas, número 30, del sector Villa Francisca, de esta capital.

Salvador fue herido de un botellazo en la carra y Lenderborg resultó con una herida de bala en su pierna izquierda.

El caso es investigado por una comisión especial designada por el jefe de la Policía, mayor general Bernardo Santana Páez, debido a que se desconoce la procedencia del proyectil que causó la muerte al joven Fanfan, quien habría sido herido por una patrulla llamada a sofocar el incidente.

Versiones de testigos dan cuenta que el incidente se originó dentro de la Quora, antigua peseta, donde compartían los baloncelistas con un grupo de amigos y un desconocido que dijo ser coronel discutió con Salvador por razones que aún no han sido establecidas.

Luego de la discusión un acompañante del alegado coronel lanzó una botella a la mesa donde compartían los deportistas, lo que provocó un desorden mayor.

Tras este incidente el supuesto coronel salió de la discoteca, buscó una pistola y regresó disparando contra Lenderborg, quien fue impactado en la pierna izquierda.

Después de este incidente, el atacante salió del establecimiento en tono amenazante y permaneció por varios minutos en las afueras.

Cuando el agresor se marchó fue que los deportistas pudieron salir para dirigirse en busca de asistencia médica, pero en ese instante llegaron al lugar dos patrullas policiales que le mandaron alto y dispararon.

Hasta el momento se desconoce quien fue el autor del disparo que causó la muerte a Fanfan, puesto que Lenderborg afirma que éste no había sido herido dentro de la discoteca, sino por los integrantes de la patrulla policial.

SOTERIO RAMÍREZ

Desde primera horas de la mañana de ayer el subsecretario de Deportes, Soterio Ramírez, se presentó al Palacio de la Policía en auxilio de los deportistas.

Ramírez lamentó la muerte del joven Fanfan, a quien dijo conocer muy bien.

“Conocía ese muchacho y se que era buena persona con deseos de progresar”, expresó.

El funcionario gestionó de inmediato cooperación para los familiares de la víctima.

TEMOR

Familiares y amigos de la víctima expresaron temor de que el caso quede impune y se quiera alegar que hubo un intercambio de disparos.

En tal sentido, dijeron confiar plenamente en que el mayor general Santana Páez, investigará el caso y lo llevará hasta las últimas consecuencias.