BAGDAD (EFE).- Ocho soldados estadounidenses murieron en Irak en las últimas 24 horas por atentados perpetrados en Bagdad y Haswa, según informó ayer martes el mando militar estadounidense a través de varios comunicados.

Tres militares perdieron la vida hoy cuando un coche bomba explotó al paso de su patrulla en un barrio del centro-sur de Bagdad, según la fuente.

El comunicado no especifica el nombre de las víctimas, pues primero debe ser comunicado a sus familiares, y dice que fallecieron cuando una bomba explotó al paso de su patrulla por un puente del centro de la ciudad alrededor de la 13:30 hora local.

Además, el mando norteamericano afirmó que otro soldado perdió la vida en la capital cuando fue alcanzado por un francotirador.

La fuente no da más detalles, y únicamente asegura que el disparo le causó la muerte de manera inmediata.

Poco después, el mando estadounidense comunicó que ayer, lunes, perdieron la vida cuatro de sus soldados por un ataque en las proximidades de Haswa, cincuenta kilómetros al sur de la capital.

Los fallecidos, de los que tampoco se facilita la identidad, pertenecían al segundo cuerpo de marines.

Por otra parte, cuatro civiles, entre ellos un niño, murieron como consecuencia de un tiroteo entre la policía y un grupo de hombres armados en Suwera (50 kilómetros al sur de Bagdad), informaron fuentes oficiales.

El ministerio del Interior especificó que el tiroteo se produjo cuando los desconocidos abrieron fuego contra un puesto de control de la policía, y los agentes respondieron disparando contra ellos.