BAGDAD (AP).- Insurgentes mataron el lunes a balazos al subdirector de la policía de Bagdad y a su hijo, informó la policía, mientras una bomba colocada al costado de una carretera destruyó un vehículo blindado estadounidense y mató a dos soldados a bordo, informó el ejército.

   Los soldados iban en el suroeste de la capital en un vehículo blindado Bradley , uno de los más pesados y de mayor blindaje del arsenal norteamericano. Eso sugiere que la bomba usada para destruirlo tuvo que ser enorme. El Departamento de Defensa dijo la semana pasada que los insurgentes estaban aumentando el tamaño y la potencia de sus explosivos a medida que acrecientan sus ataques antes de las elecciones del 30 de enero.

   Cuatro soldados fueron heridos en la explosión, ocurrida cuatro días después que otra poderosa bomba alcanzó un vehículo de combate Bradley, que cuenta también con un poderoso blindaje, matando a los siete soldados que iban a bordo.

   En total han muerto 1.355 soldados estadounidenses en la controversial guerra que emprendió el gobierno de George W. Bush en Irak, según un conteo de la AP.

   El subjefe de policía de Bagdad, brigadier Amer Ali Nayef fue asesinado con su hijo, el teniente Jalid Amer, también un oficial de la policía. Ambos fueron asesinados en el distrito de Dora, al sur de Bagdad, cuando viajaban en un automóvil rumbo a su trabajo, dijo el capitán Ahmed Ismail, vocero del Ministerio del Interior.

   Decenas de policías y funcionarios de gobiernos regionales han sido asesinados en meses recientes, parte de la campaña de los insurgentes para atemorizar a los votantes antes de las elecciones del 30 de enero y perseguir a personas que colaboran con la ocupación extranjera. El martes pasado, milicianos mataron al gobernador de Bagdad, Ali al-Haidari, y a seis de sus guardaespaldas.

   El primer ministro interino de Irak, Ayad Alaui, dijo el lunes que las autoridades han capturado a 147 presuntos insurgentes en diferentes partes de Irak, entre ellos el líder de un grupo rebelde.

   Alaui dijo que las fuerzas de seguridad iraquíes se están haciendo más fuertes cada día.

   En otro atentado el lunes, un atacante suicida hizo estallar un vehículo cargado de explosivos en el patio de una jefatura policial situada en el sur de Bagdad, matando al menos a cuatro agentes e hiriendo a otros 10, dijeron policías y testigos. En el ataque fue usado un falso patrullero policial cargado de explosivos.

   La explosión ocurrió a las 8 de la mañana en el distrito Zafarniya, dijo el comisario de policía Abdul Khaleq Hussein.