Si se pone fin al matrimonio infantil en la República Dominicana se reduciría la pobreza en las familias de 41 a 32% y a nivel nacional de 31 a 28%.
Así lo asegura un estudio realizado para el país por el Banco Mundial, el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y la Vicepresidencia de la República.
El estudio establece una estrecha relación entre el matrimonio infantil y el nivel educativo, pues según los padres, los motivos familiares figuran entre las causas principales para que las niñas abandonen la escuela en el país.
El matrimonio infantil reduce de 5 a 21 puntos porcentuales la probabilidad de completar la escuela secundaria en América Latina el Caribe.
Con relación a la educación, el matrimonio infantil podría reducir los ingresos en mujeres en un 17% al llegar a la adultez. Poner fin al matrimonio entre niños podría aumentar los ingresos nacionales en un 1.15%, establece el estudio presentado en el Palacio Nacional.
Para los individuos de hogares donde la mujer se casó a temprana edad, la pobreza podría haberse reducido de 41 a 32.1% sin el matrimonio infantil.
La República Dominicana podría haber reducido la pobreza de 30.5 a 27.7% sin el matrimonio infantil.
Además, establece que el matrimonio infantil puede no afectar directamente la capacidad de tomar decisiones, pero sí tiene impacto en esa población, en el nivel educativo.
Asegura que el matrimonio infantil está asociado con una tasa menor del registro de nacimiento y se asocia con mayor riesgo de maltrato a los niños pequeños.
Afecta los resultados del desarrollo de la primera infancia, en la mayoría de los casos de manera indirecta.
La salud. El matrimonio infantil es probablemente la causa de tres de cada cuatro niños nacidos de madres menores de 18 años.
Se estima que poner fin a los partos precoces no reduciría la mortalidad de los menores de cinco años de manera estadísticamente significativa, pero poner fin a los matrimonios infantiles podría reducir el nivel de violencia por parte de la pareja íntima.
Vicepresidencia. De su lado, la vicepresidenta Margarita Cedeño indicó que el matrimonio infantil está vinculado a la fuerte desigualdad de género y pobreza que aún persisten en muchos países.

Destacó que el deber de las autoridades es analizar el problema, estudiarlo a profundidad y debatirlo a fin de tomar la decisión más correcta. “Las políticas públicas no pueden guiarse únicamente por declaraciones públicas, deben sustentarse en la ciencia, en la investigación y en el razonamiento”, expresó