En la sociedad dominicana se producen grandes brechas entre lo que se maneja como arquetipo social y lo que existe en la realidad. Lo que se plasma en el matrimonio y la familia.

En la sociedad dominicana predomina la práctica informal de unión de parejas como matrimonio. Las uniones consensuales han sido y son el tipo de matrimonio predominante en la sociedad dominicana, Endesa 2007 presenta que el 41.8% de las mujeres están unidas, el 14.8% casadas, 24.0% nunca unida, 16.7% divorciadas, 1.4% separadas. Otro ejemplo es la existencia del “besamanos” que legitima la unión consensual en las comunidades rurales.

Estas uniones son cambiantes,  una mujer puede tener hasta 5-6 uniones con hijos e hijas de diferentes hombres presentando familias que no se estructuran alrededor de la pareja  hombre-mujer sino diferentes tipos de familias. Así podemos encontrar familias monoparentales matrifocales dirigidas por mujeres o por hombres (patrifocales) y familias extensas dirigidas por abuelas y/o tías.

Establecer que la familia en la sociedad dominicana se forma de la pareja hombre-mujer (articulo aprobado) es el desconocimiento de la naturaleza misma de la familia.

Las familias (según la antropología del parentesco)  no se forman necesariamente de parejas sino que se definen en función de la convivencia social y la unidad de residencia Según los diferentes tipos de familias se establecen distintos tipos de relaciones que pueden o no ser consanguíneas.

Nuestra sociedad difunde un modelo de familia nuclear que excluye la diversidad existente calificando los otros tipos como “familia en crisis”/“disfuncionales”, categorías que niegan nuestros orígenes e identidad afrocaribeña expresada en la familia monoparental matrifocal. En todos los tipos de familias se presentan problemáticas sociales como delincuencia, drogas y embarazos como se demuestran en diversos estudios.  

Otra ficción presente en el artículo aprobado es el desconocimiento de los matrimonios entre personas de un solo sexo. La presencia de matrimonios (de hecho) entre gays y lesbianas se encuentra en  la historia y actualidad de todas las sociedades occidentales y no-occidentales.  Muchas sociedades  los reconocen y establecen regulaciones legales que evitan situaciones de desigualdad y violación a los derechos humanos.

Independientemente de que se regule o no legalmente los matrimonios de un mismo sexo estos han existido y existen en nuestra sociedad. La aceptación legal de su existencia permite evitar situaciones de discriminación en caso de posesión de bienes, tramites legales y de adopción. Esta reforma constitucional en varios artículos (30, 44 y otros) niega la democracia, fomenta la intolerancia cultural, la exclusión y el desconocimiento de un estado que garantice los derechos de las personas independientemente de su credo religioso, estatus social, opción sexual y etnia.