El presidente de la Alianza por la Democracia (APD), Max Puig, destacó hoy que en el informe de la Dirección de Informática de la Junta Central Electoral (JCE) sobre el funcionamiento de los escáneres utilizados en las elecciones de mayo del año pasado «aparece claro que la compra de estos aparatos fue una gran estafa que sirvió para perpetrar el fraude electoral de mayo de 2016».

Puig llamó a los actuales titulares de la JCE a llegar hasta las últimas consecuencias, agregando que «tanto los responsables de la estafa como del fraude (seguramente los mismos), deben pagar por sus fechorías».

Recordó que seis de los ocho candidatos presidenciales del proceso electoral del 2016 no reconocieron los resultados, al mismo tiempo que presentaron, el día 24 de mayo del 2016, “pruebas de que dichos equipos cumplieron con el propósito de falsear la voluntad ciudadana de los votantes alterando los resultados de dicho proceso electoral».

La APD indicó que producto de a «las irregularidades de ese proceso el país se encuentra en estado crisis post-electoral que ha hundido a la JCE en el mar de la deslegitimad por parte de la población dominicana”.