Me has infectado…: ¡Te quiero como eres!

Me has infectado…: ¡Te quiero como eres!

Diantre, Píndaro… ¡estamos viviendo una experiencia memorable! ¿Cómo así, Herminio? Es que he visto el origen de un movimiento único en su clase, y… ¡mira que he visto movimientos nacer, crecer y estrellarse! Con amigos como tú, Píndaro, mi vida es mucho más interesante porque me han infectado… te estoy infectando… y, ¡hoy voy a comprometer a muchos de nuestros lectores a que se sientan infectados y comprometidos como yo!

Ahhh, amigo… ¿y tú crees que me vas a sorprender? Estuve en dos actividades que me dejaron impactado. El año antepasado en el Palacio de los Deportes, un grupo de gente -de esa que salen muchísimo en los periódicos y en televisión- armaron un reperpero con bolas de baloncesto; la otra, fue en el play del Quisqueya, donde el año pasado juntaron más gente que el caray… y un montón de cuartos.

Píndaro, me dijeron que eso lo organizó un grupo de gente que se llama Fundación Quiéreme como Soy, que tiene el compromiso de ayudar personas que Dios ha puesto en el camino de todos nosotros… ¿Cómo es eso?

Oye… ¡eso está de película! Jamás había visto el nacimiento, y ahora el crecimiento, de un movimiento en el que hermanos, esposos, amigos y empresas dijeran presente… con paciencia… ¡para lanzarse a ayudar a aquellos niños y niñas con discapacidad intelectual!

Así es, amigo Píndaro, eso es lo que se llama ¡magia de la buena! … ¡Y no es brujería! Es un movimiento real… que provoca emociones por montones, lágrimas a borbotones, y risa a mandíbula batiente ante la alegría de esos niños que desarrollan una habilidad muy especial: con tan solo una sonrisa son capaces de adueñarse de nuestros corazones.

Te lo creo –interrumpe Píndaro-. Tengo varios amigos que se han emocionado y han llorado por las cosas que han vivido al lado de esos niños con Síndrome de Down, o que son Autistas, ante sus inteligentes salidas que provocan alegría. Puedo dar fe que muchos de mis amigos han cambiado y se han sentido transformados al ser tocados por ellos. Es más, han ido a visitar la Asociación Dominicana de Síndrome de Down en Gascue, porque precisamente allí se ofrecen servicios a personas y familias de escasos recursos -muchos de los cuales no tienen en qué caerse muertos y aún así crían a sus hijos, quizás con más entrega que muchos de nosotros cuyos hijos no tienen discapacidad intelectual alguna en la vida-.

Bueno… lo que pasa, Píndaro, es que este movimiento va más lejos de hacer eventos para hacer una simple recaudación de fondos; ellos tratan de educar para la integración a nuestra sociedad a estos niños discapacitados… ¡Ellos tienen todo el derecho… y muchas veces –quizás por un temor pendejo- nosotros se lo negamos al ignorarlos!

Herminio –refiere Píndaro-… todavía para muchos en nuestro país, una persona con discapacidad es algo desconocido y más bien mirado “como un bicho raro”… Mira, esos niños desarrollan una habilidad tan chula y tan especial que son capaces de adueñarse de nuestro corazón… ¡con tan solo una sonrisa! Nuestra sociedad olvida crear, con responsabilidad, las herramientas y oportunidades necesarias para que esos seres especiales puedan sobrellevar sus vidas de la manera más independiente y feliz posible.

Eduquemos y promovamos la integración de esos niños y démosles su justo espacio en nuestras vidas… ¡sin importar que ellos sean diferentes!

Vamos a dejarnos infectar por el Movimiento Quiéreme como Soy… Con una visita a la Calle Josefa Perdomo No. 6 en Gazcue, o llamando al 809-537-0410 demos inicio a un legado de concienciación a lo largo y ancho de esta vaina que, orgullosamente, llamamos nuestro país…

¡Vamos a crear, con ellos, una revolución de colaborar y educar!

¡Vamos a infectar más y más! ¡Esto es un virus de responsabilidad!

Digamos: ¡Me has infectado! ¡Te quiero como eres!

Publicaciones Relacionadas

Más leídas